Cerdo
Aunque cuando se habla de cerdo lo primero que se piensa es en comida, la verdad es que este animal tiene virtudes sorprendentes. De hecho, diversas investigaciones han demostrado que puede ser más inteligente que los perros, y desarrollar un coeficiente similar al de un niño de hasta tres años.
El cerdo forma parte de una subespecie de los mamíferos antidáctilos, cuyo nombre científico es Sus scrofa domestica, aunque hay textos que lo identifican como Sus domestica o Sus domesticus. Muchas veces se confunde con el Sus crofa, pero es importante aclarar que esta denominación le fue otorgada al jabalí, que es la versión silvestre de este animal.
Conocido también como cochino, porcino, puerco, marrano, chancho o gorrino, es mayormente doméstico, aunque también se le puede hallar en estado salvaje. Su cuerpo es redondeado y pesado. Como rasgos característicos destacan su hocico largo y flexible, su diminuta cola, y los cuatro dedos con pezuñas que desarrollan en sus pequeñas patas. Su nombre está asociado con el término cerda, en alusión a su grueso pelo.
El tiempo promedio de vida del cerdo puede ser de 15 años. No obstante, al tratarse de un espécimen muy empleado para el consumo humano, no suele alcanzar el año de vida. Algunos, con un poco de más suerte, pueden llegar a dos.
El cerdo forma parte de la clase Mamíferos (Mammalia), y su clasificación taxonómica es la siguiente:
Subespecies:
El término S. s. domestica fue dado por el científico, botánico, naturalista y zoólogo Carlos Linneo, originario de Suecia, en el año 1758.
Por otra parte, el nombre Sus domesticus fue registrado por el naturalista alemán Johann Christian Polycarp Erxleben, en el año 1777, poco antes de su fallecimiento.
El cerdo se caracteriza por tener un cuerpo redondo y pesado, con un hocico flexible y largo. Sus cuatro patas son cortas, y cuentan con cuatro dedos con pezuñas en cada una de ellas. Posee una cola de corto tamaño, que se enrolla con facilidad, adoptando en ocasiones la silueta de un diminuto tornillo.
La piel del puerco es gruesa, pero al mismo tiempo sensible. Está conformada por cerdas ásperas en gran medida, con una interesante variante de dibujos y colores.
Pese a que pareciera que son animales lentos por su gran peso, la verdad es que son muy rápidos, ágiles, y también muy inteligentes.
Al igual que otras especies domésticas, como los gatos y perros, éstos mamíferos carecen de glándulas sudoríparas. Es por ello que tienden a mojarse o enlodarse con frecuencia, para mantenerse frescos, especialmente cuando hay temperaturas altas. Pueden sufrir irritación si pasan mucho tiempo expuestos al sol.
Los cochinos se caracterizan por tener un crecimiento y maduración relativamente rápidos, así como una corta etapa de gestación de apenas 114 días. Al momento del alumbramiento, suelen tener una camada bastante elevada. Gracias a ello son aprovechados para la producción de carne. De igual forma, suelen utilizarse como materia prima para la elaboración de grasa comestible saturada y jamón, entre otros productos.
Por otra parte, su piel suele ser empleada para la fabricación de calzado, guantes y maletas. Igualmente, las cerdas son usadas por los humanos para elaborar cepillos.
Los cochinos son extremadamente sociales, especialmente con sus similares en su hábitat natural. A partir de los 20 días de nacidos son capaces de comunicarse y jugar con otros cerdos.
Desde muy pequeños tienen la capacidad de crear fuertes vínculos con otros similares, que suelen durar por toda su vida.
Con los humanos son sumamente amigables, leales y juguetones, al igual que los perros. De hecho, se ha demostrado que son más inteligentes que los caninos.
En su hábitat natural, los cerdos son herbívoros, es decir, su dieta está basada en vegetales. De hecho, su mandíbula es especial para consumir ese tipo de alimentos.
Por otra parte, los cochinos domesticados son omnívoros, ya que además de los vegetales, también se alimentan con carne picada, o restos orgánicos que aporten proteínas. Si están en cautiverio y no son bien alimentados, pueden terminar comiéndose a sus propias crías.
Los puercos tienen una preferencia por los climas semitropicales y templados, por lo cual se les puede encontrar en muchas partes alrededor del planeta.
Los países con mayor cantidad de estos mamíferos son China, Estados Unidos, Brasil, Alemania, España, Vietnam, India, México, Rusia, Polonia y Francia.
En todo el mundo se han reconocido unas 100 razas de cerdos. Sin embargo, se cree que existen al menos 200 que no han recibido un reconocimiento oficial.
Dentro de las más populares se encuentran: Cerdo americano de Yorkshire, Angeln Saddleback, vasco, Picazo Bentheim, Berkshire, Landrace, Lop británico, Blanco de Chester, Jabalí, Danés de Protesta, Gloucester, Göttingen, Guinea, Blanco grande, Blanco medio, Celta Gallego, y vietnamita barrigón.
El cerdo se reproduce mediante monta natural. En cautiverio, usualmente la hembra es llevada al corral del macho. Este proceso dura unos seis minutos, en los cuales el macho eyacula unos 250 centímetros cúbicos.
La reproducción también puede ser por vía de la inseminación del semen. Pese a que es un proceso costoso, se pueden evitar enfermedades de transmisión sexual, y al mismo tiempo se logra una abundante descendencia de gran calidad.
De uno a dos días después de la monta, cada óvulo es fecundado por un espermatozoide, iniciando así la fase de gestación. Esta, curiosamente, tiene una duración de tres meses, tres semanas y tres días.
Por lo general, la cerda tiene entre 10 y 12 crías. Sobre este punto inciden la raza, y la cantidad de alumbramientos anteriores.
El periodo de lactancia, en cautiverio, suele ser de 21 a 28 días, aunque a veces puede durar mucho menos. El destete tradicional, por otra parte, puede producirse después de los 60 días.
La domesticación del cerdo comenzó hace más de 12 mil años en el Oriente Próximo, y paralelamente en China.
De acuerdo a investigaciones en base a pruebas de ADN sobre fósiles de cochinos, se demostró que en Europa ingresaron desde el Oriente Próximo, aunque en ese continente también comenzó a domesticarse el jabalí salvaje.
Para el siglo XIV, se produjo la introducción de los puercos domésticos de Asia en Europa, y comenzaron a mezclarse con las razas que ya se daban en el viejo continente.
En estos momentos, el cerdo doméstico se halla en prácticamente todo el planeta, en una gran diversidad de razas y especies.
Madrid, José. (2021). Cerdo. Recuperado el 22 de febrero del 2024, de Faqs.Zone: https://faqs.zone/cerdo/
