Aunque fue ignorado en su época, su obra fue ampliamente expuesta por Aristóteles. Al parecer Demócrito no se preocupó por acreditar su trabajo, y aunque conoció a Sócrates y escuchó a decenas de pitagóricos, no se supo de ninguna relación profesional o amistosa entre ellos. Un hecho curioso, es que Platón lo detestaba. Incluso se dice que era partidario de quemar todos sus textos. Pero por qué. ¿Quién era Demócrito? ¿Cuáles fueron sus planteamientos? A continuación algunos datos relevantes sobre ello.
Demócrito fue un filósofo griego, contemporáneo con Platón y Aristóteles. Fue el desarrollador de la doctrina atomista, en la cual exponía que el universo estaba compuesto por incalculables cantidades de átomos de estructura idéntica e indivisible, que daban origen a los cuerpos.
Es considerado el primer filósofo materialista de la antigua Grecia. Según Karl Marx, fue la primera mente enciclopédica entre los griegos. Y a juicio de Lenin, era el defensor más brillante del materialismo en la antigüedad clásica.
Demócrito nació en Abdera, hoy costa norte de Grecia, cerca de la isla de Tasos, Tracia, en el año 460 a.C. y murió en el año 370 a.C. Perteneció a una familia ilustre y rica. Pudo realizar estudios con magos eruditos caldeos, que el rey Jerjes I de Persia, albergó en la casa de su padre, y que le enseñaban maniobras militares. Gracias a ello y a sus viajes a países como Egipto y la India, logró obtener preparación en astrología, geometría y teología.
Fue discípulo de Leucipo, y si bien residió en Atenas, su contacto con los filósofos de la época fue escaso. Se cree que no se animó a mostrarse frente a ellos.
Se le considera un filósofo presocrático por su temática de la physis, pero puede ser un error cronológico, porque era coetáneo con Sócrates y otros filósofos que seguían a éste, quienes afrontaban temas éticos-políticos.
Demócrito investigó y completó la teoría atómica del universo. Diseñó los postulados que explicaban excelentemente su teoría atómica, a través de razonamientos lógicos, porque las teorías filosóficas griegas no proyectaban proposiciones mediante experimentos.
Afirmaba que todo lo que rodeaba a la naturaleza era una mezcla de átomos y vacíos, los átomos se movían natural y consustancialmente, colisionaban y combinaban, si sus propiedades, tipologías y formas lo permitían.
En la geometría demostró los teoremas: El volumen de un cono es 1/3 del volumen de un cilindro de igual base y altura. El volumen de una pirámide es 1/3 del volumen del prisma de igual base y altura.
En la ética, por su parte, Demócrito postuló que el equilibrio interno se podía conseguir controlando las pasiones, el conocimiento y la prudencia. Asimismo concerniente a la felicidad, decía que ésta no se encontraba en el placer, sino en la tranquilidad del espíritu.
Demócrito tenía un carácter extravagante, adjudicándosele muchas leyendas. Una de ellas es que se extirpó los ojos, porque no quería que el mundo externo distrajera sus reflexiones.
Asimismo, Demócrito reía mucho e irónicamente ante la vida. Opinaba que la risa nos hacía sabios. Incluso fue llamado el filósofo risueño, opuesto a Heráclito, el filósofo que llora.
Sus grandes virtudes fueron su gusto por la investigación, el conocimiento y la revelación de hechos nuevos. Se dice que una vez la criada le dio un higo con sabor a miel, y fue al jardín a indagar la causa. La criada le explicó que lo sumergió en miel, pero, igualmente investigó el asunto, desconociendo el hecho.
Le apasionaba localizar la razón de todo, quizás, no confirmaba las hipótesis pero descubría cosas atrayentes en el camino. No se dejaba engañar o persuadir por algo hasta no investigarlo por sí mismo.
Demócrito era de los que pensaba que todo lo que vivía en la naturaleza resultaba de una composición de átomos y vacíos. Estos átomos eran capaces de desplazarse de forma natural y, sus movimientos eran los que producían choques entre ellos, así como también combinaciones, siempre que sus características y formas lo admitieran.
Especulaba que en el universo estos choques entre átomos eran los responsables de que se formaran especies de torbellinos, y que a partir de ellos se generaban otros mundos existentes en el cosmos.
Asimismo afirmaba que el fuego era congruente con la vida, y los átomos del fuego y del alma eran de ambientes parecidos. Solo que unos eran más chicos y ovalados que otros.
Fue fundador de la escuela filosófica del atomismo, que instruía que todo lo que se distinguía estaba formado por átomos. Igualmente difundió la teoría de la percepción. Indicaba que las imágenes eran mantos de átomos, que se propagaban o plegaban, y que aquellas pequeñitas eran aptas de entrar en el ojo humano.
Discutió sobre el conocimiento bastardo y el legítimo. El primero era un conocimiento ineficaz obtenido por la percepción sensorial, mientras que el segundo era logrado por el proceso del conocimiento bastardo a través del razonamiento inductivo.
De igual modo, esbozó sobre la existencia de una clase de bien supremo al cual denominó alegría, y que estaba relacionada con la destreza de regocijarse con la vida.
Para Demócrito el arjé fue lo que él denominó como átomos. A su juicio éstos eran la esencia de todo, ya que toda cosa u objeto poseía su construcción propia a partir de ellos. Para él, eran las fracciones fundamentales de todo el universo, bien fuera vivo o muerto.
Fue discriminado porque este pensamiento negaba la existencia de Dios al presentar a la materia como auto creada.
Hasta inicios del siglo XX, se creyó en su teoría de que el átomo era indivisible, pero con el descubrimiento del núcleo formado de electrones, protones y neutrones, se descarta esta convicción, llegándose a creer que no existe un elemento fundamental a toda materia sino que la partición en elementos más pequeños es infinita.
Al lado de su maestro, Leucipo, Demócrito se le considera el precursor de la escuela atomista. Se registra entre los pos eleatas, acepta los principios de Jenófanes y Parménides, aunque despliega ideas pluralistas como Anaxágoras o Empédocles.
Para Demócrito la percepción es meramente física y mecanicista; los pensamientos y sensaciones son condiciones materiales unidas de forma fina y compleja, y no provocadas por espíritus impulsados o dioses de los elementos.
Al mostrar a la materia como auto creada y totalizada por átomos, negaba la existencia de algún Dios, convirtiéndose en el primer pensador ateo y el primero materialista.
Los trasformaciones físicas y químicas eran debido a la física y no a la magia. Demócrito se consideró el padre de la física o padre de la ciencia moderna.
Ciertas frases de Demócrito son:
Demócrito desarrolló una gran trayectoria y obra entre los años 460 y 370 a. C. Como científico e investigador de teorías, se cree que realizó viajes por Egipto donde vivió por cinco años estudiando geometría. Además anduvo por Mesopotamia, Babilonia, Etiopía y Persia explorando en nuevos conocimientos.
Algunos pensaban que tenía la pericia de predecir el futuro. Entre sus obras más famosas esta Gran Diacosmos, que le valió ganar un premio de 500 talentos. La idea de desarrollar este libro surgió por la deposición que sintió de defenderse ante los que le acusaban de derrochar el legado que su padre le había dejado.
Diógenes Laercio le imputa a Demócrito haber escrito unas 73 obras, que tienen como base la Matemática, Gramática, Física y Ética. Empero, sólo ciertos fragmentos se han encontrado.
Considerada la más importante: La teoría atómica de la materia.
Castro, Laura. (2020). Demócrito. Recuperado el 22 de febrero del 2024, de Faqs.Zone: https://faqs.zone/democrito/