El jabalí es catalogado como el predecesor de las razas de cerdos domésticos actuales. Se le llama cerdo salvaje. Proviene de la región sureste de Asia y Europa. Desde allí fue extendiéndose hasta llegar el norte de África y a Eurasia continental. Hay muchas subespecies definidas por el contexto geográfica. Algunas de las encontradas en Europa son el jabalí ibérico y el jabalí bético, ambos ubicados en España. También se cuentan el Jabalí Sus scrofa scrofa, que es el más extendido en países como Francia y Polonia, y la subespecie Scrofa majori, que se halla en Italia.
El jabalí es un animal mamífero artiodáctilo primitivo, el único europeo que no es rumiante. Su subespecie y la del cerdo domestico derivan de una especie común. Cuando nacen se les llama rayones, debido a la presencia de rayas horizontales claras y oscuras, las cuales desaparecen posteriormente.
Es un animal capaz de adecuarse a diversidad de hábitats, por lo que está ampliamente distribuido. Es muy activo y deambula intensamente. En un día puede llegar a caminar hasta 14 Km, mínimo dos. Tiene un afinado sentido del olfato, mayor al de los canes.
El jabalí es científicamente denominado Sus scrofa, perteneciente al el Reino Metazoa. Género Sus Especie scrofa; al Orden Artiodactyla y a la Familia Suidae. Su Clase es Mammalia y la Subclase Eutheria, Superorden Laurasiatheria y al Orden Artiodactyla.
Aunque es muy parecido al cerdo doméstico, se distingue por muchos rasgos que lo caracterizan:
Además posee unas hebras inferiores tupidas. Alrededor del hocico los pelos son negros, igual que en las patas. El pelaje de las crías es rojizo suave con rayas a lo largo de color pardo claro.
Generalmente es un animal de carácter pacífico, tímido, tranquilo, hasta sociable compartiendo en grupos familiares mientras no esté en peligro o herido. En estos casos se torna peligroso y súper agresivo. Hace huecos en el suelo o prepara alguna área para reposar durante el día protegiéndose con vegetación o rocas. Sus actividades las realiza en la noche porque es dehábitos nocturnos.
Cuando andan en grupos, los bermejos, como son llamados los machos de un año, viven en el perímetro. Los que tienen entre dos a cinco años se reúnen conformando grupos solo de jóvenes. Las hembras guían a los más jóvenes y a los mayores, comandando la que tiene más edad y mayor tamaño. Los machos se mantienen atrás como vigilantes y protectores.
En edad avanzada los viejos prefieren vivir solos. Los grupos pueden ser pequeños o muy grandes, con más de 20 individuos. Por su fuerte pelaje pueden adaptarse a zonas lluviosas, si allí consiguen alimentación. No poseen buena vista, pero sí lo es su olfato y audición.
Si es requerido nadan sin dificultad por largo tiempo. Les encanta enlodarse. A este comportamiento se le conoce como baños de barro y les ayuda a regular el calor porque los jabalíes están incapacitados para sudar. Además, es muy significativo para las relaciones sociales dentro el grupo.
Su forma de comunicación es a través de sonidos, gruñidos si está a la defensiva y chillidos si esta alegre. Los aromas también les sirven para transmitir mensajes.
El jabalí es un animal omnívoro. No tiene problemas con la alimentación porque come prácticamente de todo aunque, la ingesta de materia vegetal es mayor que la de materia animal. Las opciones son múltiples, tubérculos, frutos, raíces, semillas, corteza, hojas rizomas, bulbos, bayas, ramas, brotes, hierbas, bellotas caídas, o cualquier otro vegetal que este a su alcance.
De los animales escoge los pequeños como lombrices de tierra, ranas, insectos, roedores, lagartos, reptiles, peces, moluscos, cangrejos, aves y sus huevos, hasta algunas serpientes.
En situaciones de necesidad, le toca comer materia en descomposición de algún animal más grande como el ciervo. La disponibilidad de los alimentos depende de los lugares donde se encuentre y de las estaciones.
El jabalí tampoco tiene dificultad con el lugar porque se adapta a todo tipo de ambiente terrestre. Puede vivir en numerosos tipos de hábitats, de preferencia los de climas templados y tropicales. Para ellos los requerimientos básicos son la presencia de agua y una vegetación tupida, alta que les permita cobijarse y protegerse.
Los alimentos no los preocupan demasiado, con poca cantidad les es suficiente. Las nevadas constantes si les ocasiona daño por eso descartan las regiones donde ocurren.
Es factible observarlos en pantanos, praderas, bosques tropicales, de roble, semidesiertos, matorrales mediterráneos, carrascas, aulagas, junqueras, espinos, llanuras. Inclusive habitan en selvas boreales, regiones alpinas y terrenos agrícolas.
Sin embargo, lo ideal para su feliz estadía es contar con lugares pantanosos en donde pueda hacer sus baños o revolcones de lodo para regular su temperatura. Es una necesidad para vivir mejor.
En casi la totalidad de la tierra se encuentran estos mamíferos. Están catalogado como uno de más distribuidos. Las concentraciones mayores están en los montes de Europa continental, en el norte de África y en Asia central. Exceptuando la Antártida, está en todos los continentes. Numerosas islas oceánicas también cuentan con su presencia.
Una de las razones de la introducción de este animal salvaje en América, Nueva Zelanda, Australia y ciertas islas del pacifico, ha sido el interés como animal de caza.
En los meses de noviembre y diciembre inicia el periodo de celos. Uno de los indicadores son las frecuentes y agresivas peleas de los machos. Tienen que aprovechar los 23 días anuales que dura el celo de la jabalina. Luego del cortejo y apareamiento sobreviene la gestación la cual dura aproximadamente tres meses, tres semanas y tres días; curiosidades de la naturaleza.
Para marzo ya empieza el parto el cual es un evento organizado por las hembras gestantes. Antes del momento preciso, cada una de ellas acondiciona, en solitario, su nido. Escoge un árbol o un malezal denso para hacerlo. Le da forma ahuecada y cubre la superficie con hierbas, ramas y hojas a modo de manto.
Si la madre es mayor de edad y de tamaño, puede tener un promedio de 6 crías. Si es joven da a luz de tres a cuatro. Los recién nacidos se llaman jabatos o rayones, nacen con un peso que oscila entre 600 gr a 1 kg. También tienen los ojos abiertos y están dotados de ocho dientes. Suelen tener rayas en el pelo pero paulatinamente adquiere su color típico.
Se quedan en el nido solamente durante una semana, luego acompañan a la madre quién los amamanta por tres meses pero, también les suministra materia sólida. El macho a los diez meses ya adquiere madurez sexual. La hembra puede tardar hasta 20 meses.
Por ser un mamífero, el proceso respiratorio del jabalí se efectúa por sus dos pulmones, los cuales están libres en la cavidad pleural. Igualmente se bifurcan en bronquios, bronquiolos y alveolos pulmonares.
Esta especie se clasifica en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza con Preocupación Menor. No obstante, sus hábitats son destruidos ocasionándoles daños y hasta la muerte.
Por otro lado, el jabalí es objeto de caza en múltiples regiones tanto por los hombres como por animales depredadores, entre estos destacan el lince rojo, el tigre, el leopardo, el puma, el lobo gris y el oso negro americano.
Castro, Laura. (2020). Jabalí. Recuperado el 22 de febrero del 2024, de Faqs.Zone: https://faqs.zone/jabali/