El dibujo o arte gráfico es una de las primeras expresiones del hombre, no necesita de la palabra, se hace de signos. Códigos que se plasman con lápiz y color en papel o cualquier otra superficie. Puede ser figurativo o abstracto. Su tipo determina las técnicas, herramientas, materiales y soportes a utilizar. Es considerado el padre de todas las artes, permite crear bocetos para pinturas y esculturas, copiar y grabar obras determinadas. Más allá, plasmar la experiencia vivida o íntima del artista en el papel, en este caso, una creación única.
El dibujo es un lenguaje gráfico universal. La línea o imagen plasmada con materiales secos o húmedos sobre un espacio plano. La representación gráfica de objetos en papel, cartón y otros soportes físicos, se considera la base de toda creación plástica. Antecede a la pintura, escultura y arquitectura.
Consta de elementos básicos, dispuestos según el tipo y objetivo del diseño. Responde a un método o técnica, también a la creación intuitiva del artista. Generalmente se confunden los términos dibujo y pintura, el primero emplea la línea como recurso comunicativo, el segundo la mancha generada por el uso de tintas y pigmentos.
El dibujo es un signo visual, transmite una información y como mensaje visual distingue dos tipos de entidades teóricas: el signo icónico y el signo plástico. El primero es analógico y mimético, el segundo posee códigos basado en la línea, el color y la textura.
Es una obra de arte bidimensional creada a partir de trazos y tonos logrados con herramientas secas. En ocasiones puede incluir medios húmedos como la tinta o la acuarela.
Es la marca visible que se hace con la herramienta en un soporte físico, puede estar hecha de líneas, como de puntos o sólo sombreado. Algunos dibujos no tienen una línea explícita, se crean construyendo áreas sólidas que generan espacios de luz y oscuridad.
Según el tipo de dibujo y el método a seguir para su realización, el dibujante requiere de conocimientos más o menos técnicos, también información real del objeto a representar. En la arquitectura, por ejemplo, el dibujo de las infraestructuras está hecho a escalas.
Los primeros dibujos provienen de la prehistoria, de hace 73000 años. Consisten en imágenes encontradas en techos y paredes de cavernas como la Cueva de Altamira, situada en el municipio Santillana del Mar, Cantabria. De estos existen pocos ejemplares debido a la fragilidad de los materiales en los que fueron elaborados y los avatares del tiempo. Muchos, con formas abstractas, no figurativas, e inclusive inacabadas.
Fueron las civilizaciones de la Antigua China, Mesopotamia, Valle del Indo o Antiguo Egipto, la Antigua Grecia y Roma, quienes idearon los primeros cánones de proporciones. Ya en la Edad Media el uso del dibujo era extendido, representaba sobre pergaminos temas principalmente religiosos. La cultura islámica contribuía a su difusión, con la elaboración de dibujos preciosos que acompañaban textos de anatomía, astronomía y astrología.
El dibujo floreció en el Renacimiento. Durante este período se estudió por vez primera el método de reflejar la realidad con la mayor fidelidad posible, atendiendo a normas matemáticas y geométricas. Surge la perspectiva cónica de Filippo Brunelleschi. El dibujo adquiere valor propio dentro del arte y sirve como estudio previo imprescindible para el desarrollo de la pintura, escultura o arquitectura.
Los elementos básicos del dibujo son 10: punto, línea, forma, proporción, perspectiva, volumen, luz y sombra, estructura, textura y color. VAmos a verlo de manera más detallada:
Los tipos de dibujo más comunes son:
Los dibujos se clasifican según su objetivo en: croquis, dibujo, plano, gráficos, diagramas y ábacos. El croquis es la representación a mano alzada de los objetos, respetando sus proporciones. El dibujo la forma a escala con los datos básicos para definir el objeto. El plano la representación de los objetos en función de su ubicación o la función que cumplen. Los gráficos, diagramas y ábacos muestran medidas o valores de procesos de trabajo mediante líneas o superficies.
Otras clasificaciones del dibujo hacen mención a la forma de confección: a lápiz, a tinta, original y reproducción. A su contenido: general o de conjunto, de despiece, de grupo, de taller, o esquemático. Y también a su destino: de taller o de fabricación, mecanización, montaje, clases, ofertas, pedidos y recepción.
La técnica más usada y difundida es el dibujo a lápiz, se realiza con lápices de grafito o colores de una determinada dureza. Se inclina la herramienta de forma suave sobre la hoja o soporte y se aplica intensidad según el resultado deseado. Una técnica similar es el dibujo sepia que sustituye el grafito por una sustancia marrón obtenida del cefalópodo del mismo nombre.
Otros métodos tradicionales son el dibujo a sanguina, material rojizo obtenido de hematites que se usa diluido en agua o en barras. Y el dibujo a tinta, que tiene como herramienta la tinta china, aplicada a través de pinceles o plumillas.
Entre las técnicas modernas figuran: el dibujo a lápiz de tinta, una opción precisa, delicada y recargable. El dibujo a rotulador o marcado, con variedad de tipos y tamaños de rotuladores o marcadores. El dibujo en aerógrafo, especialmente utilizada en el body paint y el trabajo sobre lienzo. Y el dibujo en tablas digitalizadoras, dispositivos con lápiz electrónico, ideales para la creación de dibujos animados.
Los materiales más utilizados para el dibujo son el papel y el lápiz, y sus semejantes tecnológicos: procesador, teclado, mouse o lápiz óptico. Estos equivalen a los soportes, tintas, pigmentos o colores, e instrumentos necesarios para el desarrollo de la técnica gráfica.
El papel en los más variados tipos y gramajes es el soporte físico por excelencia. Puede ser opaco, generalmente blanco, satinado y brillante; o transparente, de color gris claro o azulado, fuerte y poco o nada aceitado. También tipo cartón. Más la selección de la superficie en la que será plasmada el dibujo depende de la finalidad de este. Una obra representativa y/o decorativa puede ir en lienzo; y dibujos en carteles con fines publicitarios, imprimirse en polipropileno.
El lápiz de grafito es el instrumento más común e importante en el dibujo, se clasifica según su dureza en números y letras. El lápiz de grafito 9H es el más duro y el 9B el más blando, entre uno y otro existe otros 10 en la clasificación. En el dibujo se emplea además la pluma estilográfica, carboncillos, compás, regla, escuadra y transportador de ángulos.
El color en el dibujo es propinado tanto por el grafito como por pasteles, conté, marcadores, marcadores, pluma o tinta. Tintas, pigmentos y colores, secos y húmedos, que brindan caracteres diferenciables en el arte. Algunos dibujantes trabajan con una especie de tinta invisible, especialmente para plasmar su firma en la obra.
El dibujo es una forma de expresión. Permite comunicar en un lenguaje no escrito elementos que se perciben a través de los sentidos, conocidos como signos, llámense figurativos o abstractos. Trasciende la frontera de los idiomas, es entendible, un lenguaje universal. Si es claro, preciso y consta de datos de valor, representa un medio de comunicación completo y eficiente.
El dibujo artístico realizado libremente y con una finalidad estética, es muestra de la capacidad creativa del hombre, su habilidad para copiar una idea o bien, la originalidad para crearla con trazos en un papel. Distingue un estilo personal. Es una de las primeras formas artísticas desarrolladas en la historia. Es una composición que además de imágenes y perspectivas, transmite ideas y sentimientos.
Torrealba, Adriana. (2021). Dibujo. Recuperado el 22 de febrero del 2024, de Faqs.Zone: https://faqs.zone/dibujo/