Arte bizantino

Cuándo se desarrolló: Del siglo IV al siglo XV
Arte bizantino

Con el surgimiento del Imperio bizantino, también conocido como Imperio romano de Oriente, en la Edad Media surgió un nuevo estilo de arte. El denominado arte bizantino se plasmó en pinturas, mosaicos, esculturas y construcciones arquitectónicas desarrolladas a partir del siglo IV después de Cristo. Tuvo su epicentro en las ciudades de Bizancio-Constantinopla y Rávena, la primera de ellas capital del Imperio. El arte bizantino, extendido hasta el siglo XV, se caracterizó por expresar el poder del hombre (Estado) y lo sobrenatural o divino (Iglesia). Fue un baluarte en la defensa y difusión del cristianismo.

¿Qué es el arte bizantino?

Es un estilo de expresión artística desarrollado entre los siglos IV y XV dC, en el Imperio romano de Oriente. Exalta el poder civil, el respeto y servicio al Estado; y el poder sobrenatural, representado por Dios y los santos. El arte bizantino sucede al estilo Paleocristiano, imperante en los cinco primeros siglos de esta era. Fusiona elementos de los estilos romano, oriental, griego y helenístico.

Se plasmó en pinturas, mosaicos, esculturas y construcciones arquitectónicas durante toda la Edad Media. También en la orfebrería. Es una expresión artística propia y diferenciada que caracterizó a las ciudades de Bizancio-Constantinopla y Rávena. Y que igual se extendió a otras regiones y países de Europa.

El arte bizantino fue de gran importancia para el Imperio bizantino, reconocido en principio por su carácter militar y político. Se convirtió en la palanca de una cultura defensora del cristianismo. Su desarrollo puede dividirse en cuatro etapas históricas.

¿Cuáles son sus características?

El arte bizantino se caracteriza por el uso del color, especialmente en las pinturas. Cristo y los santos -como imágenes de la divinidad y el poder sobrenatural– constituyen la temática principal de este estilo. La religiosidad se manifiesta en pinturas, mosaicos, esculturas y edificaciones de gran tamaño.

El estilo artístico fusiona elementos de diferentes culturas, destacando la persa y musulmana, ya por sí una mezcla documentada de otras culturas. Del arte bizantino pueden observarse monumentales iglesias de sencilla fachada (hecha de piedra y ladrillo), pero de fascinante interior. Este último decorado con piezas de orfebrería, pinturas murales y mosaicos.

Los templos de la época se caracterizan por su planta centrada o en forma de cruz griega, cúpulas y bóvedas celestiales. La pintura bizantina al igual que la arquitectura muestra una línea teológica que indica la relación Dios-hombre. En ella destaca además la figura de María. En términos generales, el arte bizantino comunica a través de la imagen lo que con palabras no se expresa. Resultaba un medio ideal para llegar a quienes no sabían leer o escribir.

¿Cuál es su origen?

Se origina en el Imperio bizantino. Con la muerte del emperador romano Flavio Teodosio, en el año 395, el antiguo Imperio es dividido entre sus hijos Arcadio y Honorio. A Arcadio le correspondió el Imperio de Oriente, de notable influencia griega. A Honorio el Imperio de Occidente, que cayó en poder de los bárbaros en el 476.

El Imperio bizantino, llamado así por su capital Bizancio, pasó entonces a ser sucesor legítimo del Imperio romano. Fungía como centro estratégico político, militar, económico y cultural del mundo occidental. Ameritaba una nueva forma de arte que llegase por igual a las regiones, haciendo a un lado la diversidad de etnias, idiomas y religiones.

El naciente estilo artístico significó un redescubrimiento de lo clásico, también la presentación del Dios hombre en figuras abstractas. Los artistas no se disponían a representar la realidad, no la que por naturaleza se conoce. Por ser el Imperio bizantino baluarte en la defensa del cristianismo, el arte bizantino se caracterizó por la pintura de frescos en murales y mosaicos. Además de los iconos, figuras religiosas pintadas en paneles de madera portátiles.

¿Cuáles son las etapas del arte bizantino?

Desde sus inicios hasta el siglo XV (1453), finales del Imperio, pueden distinguirse cuatro etapas o momentos claves del arte bizantino. La I Edad de Oro (siglos IV-VII) define el comienzo del estilo fuertemente marcado por el Arte Romano, inclusive llegó a llamarse Nea-Roma. Ambos artes se diferenciaban por la manera de expresar la realidad y representar a la figura humana.

El Bizantino tenía además un carácter sagrado. Durante la I Edad de Oro, hacia el año 726, aparecen los Iconoclastas, destructores de las imágenes personificadas. Las discusiones Iconoclastas (segunda etapa) que se extendieron hasta el 843 impulsaron desde el siglo IX hasta el XI la destrucción de infinidad de obras bizantinas. El arte que expresara entidades humanas y religiosas era devastado.

Otras dos etapas influyeron en el desarrollo del arte bizantino, la II Edad de Oro que va desde el s. IX hasta el XII; y la II Edad de Oro del Imperio, que llega al s. XV. Los turcos conquistan Constantinopla y el arte se hace más independiente, se expande a Italia y otros países del continente.

¿Cómo era la pintura del arte bizantino?

En Bizancio-Constantinopla creían en la existencia de un Dios, Cristo, María y los santos, eran el tema de inspiración. La pintura bizantina presenta imágenes religiosas personificadas, hombres y mujeres de pie, con figuras alargadas o estilizadas y rostros imponentes. Llevando un manto y algún objeto en las manos. Se dedicó además a la iluminación de los manuscritos.

Destacan en el arte la pintura de frescos en los murales de las iglesias o templos y la pintura de iconos sobre madera realizada en los caballetes. Los artistas de la época atendían a las exigencias del alto mando de la iglesia, respetando siempre el carácter simbólico y abstracto.

Era predominante el uso del color, así como la técnica del mosaico. Los mosaicos revestían muros completos, sin dejar ver la sencillez de sus materiales. Además daban pie a la suntuosidad ornamental característica del arte bizantino.

¿Cómo era la escultura del arte bizantino?

Derivada del arte Romano, la escultura bizantina se caracteriza por su uniformidad y rigidez. En principio elaborada en tamaños pequeños, destacando escudos y símbolos tallados en marfil, piedra o mármol. Son también conocidos los sarcófagos de Rávena, dípticos de marfil y tapas de libros sagrados.

La escultura bizantina pasa por una etapa de exageración que inicia con el s. XII de la que se conocen figuras humanas de grandes dimensiones. Como en las pinturas figuras estilizadas, pero poco naturales, con vestimentas de pliegues rectos y paralelos. Un tributo a la geometría. Presentan rostros firmes y ojos grandes, que miran hacia arriba, como evocación al servicio.

En el arte bizantino influye la cultura asiática, representada por joyas y otras piezas de orfebrería que agregan lujo y vistosidad a las esculturas. Algunos historiadores mencionan además la fabricación de cerámica del arte bizantino, aunque sin predominancia en la época por el escaso apoyo a la artesanía. Destaca en este estilo la cerámica de brillo rojo.

¿Cómo era la arquitectura del arte bizantino?

Sencillamente majestuosa. La arquitectura bizantina conserva la piedra y el ladrillo utilizado por el movimiento artístico romano para levantar sus edificaciones. Sin embargo, el interior de las estructuras trasciende con la presencia de pinturas (mosaicos), esculturas, y joyas de la orfebrería bizantina. En algunos casos redunda en el oro, empleado para dar brillo y apariencia de excelsitud.

La construcción de bóvedas con formas de triángulos esféricos era propia del arte bizantino, permitían el dinamismo en las estructuras de la iglesia. Plantas cuadradas en el conjunto y circulares en las cúpulas, podían darse diversos usos al espacio. Otro aporte de la escultura bizantina fue la decoración y diversificación de los capiteles; se creó el tipo teodosiano y nuevas propuestas del capitel cúbico.

En el caso de las iglesias o templos bizantinos las plantas eran centralizadas, algunas veces cruciforme (en forma de cruz griega). Las obras presentaban columnas de estilo clásico, arcos de medio punto y colosales cúpulas. Representaban el triunfalismo del régimen Bizantino y el poderío de la iglesia.

¿Cómo era la orfebrería del arte bizantino?

El arte bizantino era considerado un medio para impresionar a los pueblos, todos sus elementos denotaban valor. Pinturas, esculturas y obras arquitectónicas eran decoradas con joyas, elaboradas con perlas, piedras preciosas, oro y otros materiales de notable esplendor. Se reconoce entre otras obras la llamada Pala de Oro, retablo ubicado en la Basílica de San Marcos, Venecia.

La joyería bizantina no sólo se quedó entre los muros de los templos, pasó a formar parte de la decoración personal en la Edad Media. Transmitía la iconografía cristiana, el poder de la iglesia, la diplomacia y el bien estar con el Estado.

En el año 529 dC se crearon restricciones para el uso de algunas prendas. Solo el emperador Justiniano decidía quién llevaba las joyas más finas, las hechas con perlas, esmeraldas y zafiros. Por lo general, obsequiadas a diplomáticos, gobernantes y líderes militares. El oro y otras piedras preciosas podían ser portadas por el común de los ciudadanos, Bizancio era rico en minas de oro.

¿Cuáles son sus principales obras?

Las ciudades de Constantinopla y Rávena fueron los centros artísticos del Imperio bizantino, en ellas se conservan las más emblemáticas obras. Iniciando con las iglesias, demostración de poder. La iglesia palatina Santa Sofía de Constantinopla es una joya de la arquitectura mediterránea. Está hecha sobre una planta centralizada y ostenta una imponente cúpula.

En el Museo de Santa Sofía, se encuentra otra obra característica del arte bizantino, el Cristo Pantocrátor. La imagen de Jesús sosteniendo con una mano las sagradas escrituras y con la otra señalando (levantando su dedo índice) tuvo muchas lecturas en su tiempo. El aura de luz que lo rodeaba y la compañía de los cuatro evangelistas, decían transmitía respeto o temor.

La Basílica de San Apolinar in Classe de Rávena es de planta circular, emplea la bóveda celestial que destaca la mano de Dios y más abajo, a los profetas Elías y Moisés. Recrea la transfiguración del Señor, repite a Cristo en la cruz y lo coloca sobre sus apóstoles Pedro, Juan y Santiago, representados por ovejas. La de San Apolinar es la primera referencia figurativa de Cristo.

¿Por qué era importante?

Constantinopla gozaba de una reconocida situación estratégica, no solo en lo político, económico y militar, también en lo cultural. La imposición del Cristianismo hacia el siglo IV había creado una fuerte resistencia y eran frecuentes los enfrentamientos religiosos. Iglesia e Imperio se asocian y el arte bizantino se convierte en herramienta de enlace con los ciudadanos.

Se cataloga como un arte oficial por cuanto favorece al poder del Estado y su ahora aliada iglesia, el arte se desarrollaba a la par de la fe en el Imperio.

¿Cómo citar este artículo?

Castro, Laura. (2019). Arte bizantino. Recuperado el 22 de febrero del 2024, de Faqs.Zone: https://faqs.zone/arte-bizantino/

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