Omega 3
El organismo requiere ciertos tipos de grasa que deben ser obtenidos de los alimentos porque él no tiene la capacidad de producirlos por sí mismo. Uno de ellos es el Omega 3, el cual es muy favorable para la salud. Muchos estudios han demostrado su importancia y las ventajas que conlleva incluirlos en nuestra dieta diaria.
El omega 3 es un grupo de ácidos grasos poliinsaturados: El ácido alfa-linolénico, el eicosapentaenoico (EPA) y el docosahexaenoico (DHA). Tienen el primer doble enlace en el tercer átomo de carbono. Es una grasa saludable que ofrece substanciales beneficios al cuerpo humano al disminuir la cantidad de triglicéridos y otras grasas producidas en el hígado.
Conjuntamente con el Omega-6 se conoce como grasa esencial porque no es sintetizada de manera natural, es adquirida mediante la alimentación sólida y en bebidas. Existen dos fuentes de estos ácidos: De origen vegetal y de origen marino.
El nombre de omega obedece a la colocación que tienen los dobles enlaces en el lado contrario al ácido carboxílico. El omega 3 ácido graso linolénico, tiene el primer doble enlace en el carbono número 3. Estos nutrientes son componentes naturales de las grasas y los aceites
Los ácidos grasos omega-3 conforman del 5% al 10% del total de las calorías. Forman parte de los fármacos reguladores de lípidos denominados antilipémicos. Desempeñan un importante rol en la disminución de los niveles de triglicéridos, sustancia en la sangre semejante a la grasa.
Se encuentra natural en un grupo numeroso de alimentos y como suplemento es procesado en forma de cápsulas. La absorción de los ácidos grasos en los tejidos neuronales, es habitualmente bastante lenta.
Después de absorbidos, el proceso del metabolismo ocurre a través de tres vías: Inicia trasladándose hacia el hígado donde se integran a distintos tipos de lipoproteínas, posteriormente son conducidos a depósitos de lípidos periféricos.
En la otra vía los fosfolípidos de la membrana celular son sustituidos por fosfolípidos lipoprotéicos, luego pueden accionar los ácidos como antecesores para diversos eicosanoides. Mediante la última vía casi todos se oxidan para obtener la energía requerida.
Sirven para proteger la salud favoreciendo al organismo en distintos procesos fisiológicos. Corre por todas las células modificando su estructura y función de la membrana plasmática.
Entre sus propiedades destacan: Positivo efecto en el sistema inmunológico, antiinflamatorio, protección del corazón, acción antidepresiva. Igualmente, los omega-3 suministran calorías para la energía, tienen variadas funciones en los vasos sanguíneos, pulmones y el sistema endocrino.
En las mujeres embarazadas, es esencial, porque interviene desde los primeros meses en el adecuado desarrollo cerebral y de la retina del feto. Además, disminuye la posibilidad de sufrir parto prematuro, preeclampsia o depresión post parto.
Hay tres tipos principales catalogados como los ácidos grasos omega 3 más importantes para la salud: Ácido alfa-linolénico (ALA), Ácido eicosapentaenoico (EPA) y Ácido docosahexaenoico (DHA).
Está presente principalmente en las nueces y en el pescado azul, siendo este el que más lo posee. Se recomienda la ingesta frecuente de estos alimentos. Entre los pescados se citan: Caballa, trucha, sardinas, boquerones, anchoas, bacalao, arenque, cazón, atún, salmón, estos dos últimos ostentan EPA y DHA, ambos con bondades directas para el corazón. Además, algunas algas marinas, aves, conejos.
Otros alimentos de origen vegetal que contribuyen a obtener estas grasas saludables son aceite de linaza y semillas de linaza, que tienen la mayor cantidad de ALA; aceites de canola, oliva, colza y de soja; semillas de chía, aguacate, soja, espinacas, brócoli, rúcula, coles de Bruselas, verduras, frutos secos, alimentos integrales.
Los especialistas sugieren comer 25 gr de nueces diarios y cuatro raciones de 150 gr de pescado semanalmente. Obviamente, sin dejar de lado los demás alimentos señalados porque todos ellos permiten aprovechar los beneficios del omega 3. Todos tienen proteínas, vitaminas, minerales y antioxidantes, elementos que no poseen los suplementos.
Además de obtenerlo de los diferentes alimentos, se puede tomar en forma de medicamentos. Las presentaciones que pueden adquirirse sin prescripción médica son cápsulas de gel. Se toman vía oral, diariamente, a la misma hora, según las indicaciones del prospecto en la caja.
Los Omega 3 que requieren receta vienen en cápsula de gel rellena de líquido, se ingiere por vía oral. Dependiendo del tipo, lo indican una o dos veces al día con o sin alimentos. También hay algunos que deben ser acompañados con los alimentos obligatoriamente.
En todos los casos, es necesario cumplir con las instrucciones. No debe tomarse mayor o menos cantidad, ni con mayor periodicidad de lo indicado. La capsula no se fracciona, tritura, disuelve o mastica, se traga entera.
En cuanto a la cantidad requerida por una persona depende de su edad y sexo. Generalmente la indican en gramos. La Autoridad Europea de Salud Alimentaria establece: Para niños de 2 a 4 años 150mg/día, entre los 6 y los 18 años 200 mg/día y para los adultos 250 mg/día.
Los beneficios del Omega 3 son muchos, entre ellos se citan:
Es muy poco probable que los ácidos omega 3 obtenidos de los alimentos sean excesivos, por consiguiente no hay ningún temor de causar efectos indeseables o nocivos. No obstante, los que se adquieren a través de compuestos sí pueden ocasionar algunos efectos secundarios leves.
Algunos de ellos son eructos, mal aliento, acidez o dolor estomacal, vómitos, estreñimiento, diarrea, náuseas, alteración en el sentido del gusto, dolor de cabeza, sudoración olorosa, erupciones cutáneas, dolor en las articulaciones.
Aunque los efectos suelen desaparecer luego del organismo adaptarse, si llegasen a agravarse o prolongarse es pertinente llamar a su médico. Asímismo, tienen que estar bajo supervisión médica aquellas personas con situaciones particulares como sufrir de triglicérido elevado y que toman omega 3 en dosis altas.
En estos casos puede desarrollarse un efecto secundario grave como problemas hemorrágicos y afectación de la función del sistema inmunológico.
Para evitar algún tipo de efectos o contradicciones, deben seguirse las siguientes orientaciones:
El omega 3 no engorda, son grasas que pueden ayudar a bajar de peso si se ingieren adecuadamente mediante una dieta balanceada. Sucede porque contribuyen a que las células hagan una mejor metabolización de los alimentos lográndose un buen equilibrio del organismo. Estos alimentos no pueden faltar en los menús diarios.
Existen muchos suplementos dietéticos de Omega-3. Ejemplos de ellos son los que incluyen aceite de pescado, aceite de krill, aceite de hígado de bacalao, aceite de alga. Los mismos aportan una extensa variedad de dosis y de formas.
Igualmente, están los fármacos denominados ésteres etílicos del ácido omega 3, son los ésteres del EPA y del DHA que intervienen en la reducción del colesterol VDL por ende, se disminuyen el triglicérido producido en el hígado. Se localizan en el aceite de pescado.
Además, los ésteres etílicos icosapent, recetado para personas con enfermedades cardíacas ya establecidas y, los ácidos carboxílicos de omega 3. Esta es una forma de ácido graso libre pura indicado como complemento en la dieta para disminuir la concentración de triglicéridos en adultos para tratar la hipertrigliceridemia en estado grave.
Del Valle, Numiralda. (2021). Omega 3. Recuperado el 22 de febrero del 2024, de Faqs.Zone: https://faqs.zone/omega-3/
