Existen ocho especies de osos, entre los que destaca el oso negro. Habitante de Alaska, México, sureste de Estados Unidos y Canadá Es uno de los mamíferos más grandes que hay en el continente americano. Estos animales desempeñan un papel fundamental en la fortaleza y futuro de los bosques, ya que se encargan de dispersar semillas en grandes superficies de terreno. La presencia de ellos es un gran indicador del bienestar de los ecosistemas.
El oso negro acreditado también como oso negro americano, baribal o Ursus americanus, es una variedad de oso muy común y simbólica. Es una especie y no un color. Es decir, que se encuentra en más tonos que cualquier otro mamífero norteamericano.
En general evita el contacto con los humanos. Es exclusivo de Norteamérica, Canadá, México y parte de Alaska. Es un mamífero carnívoro y su tamaño es bastante grande, aunque es más pequeño que su semejante, el oso pardo.
El oso negro posee la información siguiente:
Es una especie endémica, de un tamaño más pequeño que los osos pardos y los osos polares. Su longitud promedio es de 1.7 m. Su peso varía, dependiendo del género, la edad y la época del año, pero en general los machos alcanzan de 115 a 270 kilos, y las hembras de 90 a 140 kilos.
Su cuerpo es rectangular, más largo que alto, patas traseras más largas que las delanteras. El pelo comúnmente es de color negro, marrón oscuro y canela. Existen, pero muy raros, en color blanco de la costa del pacífico en Columbia Británica Central y de tono azulado en el sur este de Alaska.
Las patas traseras, largas y fuertes, son más pequeñas que las delanteras. Le permiten conservarse firme y caminar en estado bípedo, siendo un rasgo muy llamativo de estos mamíferos. El oso negro es un animal plantígrado, es decir, camina colocando enteramente la planta de los pies sobre el suelo.
De perfil facial recto, orejas ovales, ojos chicos de color marrón y hocico afinado. La cola es de unos 12 cms, posee garras de 2.5 Cm, no retráctiles y más cortas que las del oso pardo. La hembra tiene tres pares de mamas.
Poseen gran agilidad y son buenos trepadores, alcanzando velocidades de 40 km/h en trayectos cortos. Marcan los árboles para orientarse en el bosque. Son hogareños y viven aproximadamente unos 20 años. Si bien no tienen buena visión, lo recompensan con un excelente olfato y oído.
Son animales solitarios, exceptuando la época del apareamiento. El oso negro es de gran tamaño y robustez lo que no le impide agilidad y precisión al cazar. Escala árboles cuando tiene que escapar de alguna amenaza o simplemente para descansar. De igual manera, los trepa para conseguir la miel, alimento que le encanta.
En el otoño, el oso negro aumenta grandemente su consumo de alimentos. Con la finalidad de obtener la reserva alimenticia que le permita mantener un metabolismo en equilibrio durante el invierno. Porque, si bien, no hibernan, pasan por una especie de sueño invernal. En ese lapso la temperatura de su cuerpo baja unos grados y en su cueva duermen por largo tiempo, hasta 7 meses.
También son nadadores hábiles, pueden cruzar extensos cuerpos de agua para pasar de un extremo a otro o trasladarse desde tierra firme a una isla. Entre los osos hay una eminente jerarquía social expresada por el sexo, el tamaño corporal, la potencia y la excitación de cada individuo. También por la existencia de crías entre las hembras.
Los machos dominan a las hembras, exceptuando los casos en que las hembras tienen oseznos. Ella peleará hasta la muerte con cualquier macho imperioso para defender la cría.
Si bien es considerado carnívoro; el consumo de carne, solos constituye, el 3 % o el 20 % de su dieta. Mayormente consume plantas, un 75 % lo conforman las frutas, uvas, nueces, herbajes, bellotas y raicillas. Por su fuerza, vigorosas garras, rapidez y avanzados sentidos, son brillantes cazadores. Logran agarrar presas de diversos tamaños, desde termitas, insectos, ratas, alces, truchas, salmones y crustáceos.
Fortuitamente, puede favorecerse de la carroña que dejan otros depredadores y comen huevos, que mejoran el aporte de las proteínas en su alimentación. Además, les encanta la miel y son capaces de treparse en grandes árboles para conseguirla.
El oso negro es el oso más común en el norte de América. Puede localizarse en un área geográfica que ocupa desde el norte de Canadá y Alaska a la Sierra Gorda de México, y desde las playas atlánticas, a las costas pacíficas de los EE. UU.
Este oso opta por los bosques templados, de abundante vegetación, las montañas, vive en alturas hasta de 3500 m. y áreas boreales. En esos lugares encuentra su comida y territorio para ocultarse. Originariamente, evitaba el campo abierto por la falta de árboles que no le ofrecía oportunidad de escapar del oso pardo, su antagonista y a veces su predador.
El oso negro es una variedad de mamífero terrenal de la familia de los úrsidos que es procedente de América del Norte. Se puede ubicar desde el norte de Canadá y Alaska, hasta el territorio de Sierra Gorda en México. Incluye también, el litoral atlántico y pacífico de los Estados Unidos.
La mayor concentración de individuos se encuentra en los bosques y regiones montañosas de Canadá y los Estados Unidos, donde ya es una especie protegida. En la región mexicana, las poblaciones son más escasas y suele limitarse a los terrenos montañosos del norte del país.
Se tiene un aproximado de 850 mil a 950 mil osos habitando Norteamérica, pero en sí, no se está al corriente de la cantidad de osos negros que moran en México. De lo que sí se tiene una investigación es que, a mediados del siglo pasado, hubo una reducción de un 80 % de la población de estos animales.
Los osos negros son ermitaños que se juntan en parejas, solo al llegar la época de apareamiento o cuando la hembra tiene crías, que las acompañan. Su apareamiento ocurre de mayo a agosto, en primavera y en la época de verano en el hemisferio Norte. Los machos llegan a su madurez sexual a los tres años, en cambio, las hembras tardan más, entre los dos y nueve años de vida.
Como todos los osos, el oso negro es una especie vivípara, lo que representa que la procreación y desarrollo de las crías se da dentro del vientre de las hembras. La osa muestra una fecundación diferida, los óvulos solo emprenden su desarrollo a las 10 semanas posterior a la cópula. Esto, para impedir que los cachorros lleguen en el otoño.
La gestación tiene un lapso de seis a siete meses, al final de la cual la hembra parirá de dos a tres oseznos. Las crías nacen a fines del invierno, en la guarida invernal de la madre. Nacen sin pelo, con ojos cerrados y muy pequeños, con un peso de 200 a 400 gramos. De una misma camada pueden nacer cachorros con colores diferentes.
Los oseznos son lactados por su madre hasta los 8 meses, a partir de allí principiará a probar comida sólida. Su progenitora los cuida hasta los dos o tres años de vida cuando consiguen su madurez sexual y quedan capacitados para sobrevivir por sus medios. La longevidad puede variar entre diez y treinta años.
Como todo mamífero, el oso negro realiza una respiración pulmonar, utilizando para ello dos pulmones. Los pulmones son los principales órganos del sistema respiratorio y donde ocurre el intercambio de gases. Están ramificados en bronquios, bronquiolos y alveolos pulmonares.
El oso toma el oxígeno por la nariz y, este, de aquí realiza un recorrido por la faringe, laringe, tráquea, bronquios y finaliza en los pulmones. Los alveolos, que están en los pulmones, son los encargados de que ocurra el intercambio de oxígeno y dióxido de carbono.
El oso negro está calificado, en Norteamérica, en estado de preocupación menor, especialmente por la extensión de su ecosistema. Aquí hay poca presencia de depredadores naturales y existen decisiones de protección.
Sin embargo, algunas organizaciones en México lo consideran en peligro de extinción, como consecuencia del quebrantamiento de su hábitat, la caza y el comercio ilegal y la pérdida de hábitats.
Castro, Laura. (2020). Oso negro. Recuperado el 22 de febrero del 2024, de Faqs.Zone: https://faqs.zone/oso-negro/