Orfebrería
Una de las manifestaciones más destacadas del arte desde tiempos remotos, es la orfebrería. Se sitúa en las expresiones de las artes plásticas, porque da forma a los metales a través del moldeamiento. El vocablo orfebrería deriva de la palabra latina aurum que se traduce como “oro”, unida a faber o fabri, cuyo significado es artesano u obrero. Sin embargo, no solamente se trabaja con el oro. Un orfebre elabora bellas piezas con diferentes materiales y técnicas, tal como leerás a continuación.
Es el arte que permite crear prendas, accesorios, esculturas, objetos decorativos y utilitarios, utilizando diferentes metales como oro, plata, platino y sus aleaciones como bronce y cobre. Además, utiliza gemas para realzar sus diseños.
El creador de tan bellos objetos artísticos es el orfebre, quien trabaja, principalmente, de manera artesanal aplicando una serie de técnicas y herramientas.
Las primeras manifestaciones de orfebrería se confeccionaron en la antigüedad. En la época precolombina se hicieron objetos como alfileres para sujetar el vestido, argollas, brazaletes; diademas, adorno usado en la frente; remate de bastón colocado en el extremo.
Paulatinamente, se convirtió en una rama artística fundamental en el ámbito religioso elaborándose coronas para las vírgenes, candelabros, cruces, varillas, faroles, estandartes, entre muchos otros.
El origen de la orfebrería se remonta a la prehistoria. Ya en el período neolítico el hombre confeccionaba sencillos adornos como estatuillas; accesorios como collares, pulseras; utensilios de cocina como vasijas, vasos, platos, empleando principalmente el cobre. En principio los diseños eran geométricos llevando únicamente círculos y líneas rectas. Usaban técnicas elementales.
Luego, en la edad de bronce, hubo una cuantiosa y variada producción. Se agregó el uso del oro, la plata y el bronce. En la época medieval, la orfebrería fue de especial utilidad para la elaboración y decoración de diversos objetos religiosos y eclesiásticos de considerable importancia. Entre ellos destacan medallas, medallones, dijes y los manuscritos iluminados con polvo de oro.
Este arte inicia con la orfebrería arcaica, base de los futuros trabajos decorativos elaborados en cobre. Para la Edad Antigua, ya tenía relevancia otorgándole lujo a los imperios de Oriente Próximo. Más tarde los orfebres egipcios usaron el oro obteniéndose hermosas piezas consideradas, actualmente, obras antiguas extraordinarias. Iguales trabajos realizaron los fenicios.
El oro utilizado fue extraído de las minas de Egipto, Nubia y Arabia Saudita. Al transcurrir el tiempo la orfebrería se convirtió en todo un arte, cuya obra representa las costumbres de cada civilización. Después de implantarse en la antigua Grecia y en torno al Mar Negro, los famosos herreros de las tribus de los celtas, migraron llevándola consigo a Europa central y occidental.
En Italia se trabajó mucho este arte, observándose grandes innovaciones metalúrgicas en Roma, así como nuevos métodos para extraer el oro. Con la aparición del cristianismo, la solicitud de objetos eclesiásticos de oro se incrementó. En la Edad Media continuó el auge; el arte cristiano primitivo de Constantinopla promovió la fama de orfebres por sus obras de oro y coloridos mosaicos.
La orfebrería constituyó un fenómeno a nivel mundial, por la demanda creciente de piezas religiosas y seculares. En el renacimiento no decayó, siguió siendo una labor importante e influyente en todos los procesos comerciales y económicos desarrollados. La colonización de Suramérica fue otra acción promovida por el extensivo uso de adornos de oro en Centroamérica, Colombia, Perú y Ecuador.
En Francia, luego del Renacimiento, la orfebrería se fomentó grandemente por la ampliación en artes decorativas francesas resultado de la edificación de los palacios Fontainebleau y Versalles. A partir de este momento, hay un fuerte vínculo entre el comercio internacional y la manufactura de artículos de oro.
Las técnicas utilizadas son numerosas, muchas de ellas se fueron agregando con el tiempo. Se clasifican de la siguiente forma:
Los principales requerimientos para el trabajo del orfebre son: el horno; el fuelle, instrumento empleado para avivar el fuego en los hornos; los crisoles, usados para diluir el metal obtenido en lingotes.
La balanza, para pesar el metal necesario en la elaboración de la pieza; los martillos, muy utilizados, de distintas formas y tamaños. El yunque para forjar; las tenazas para varios usos como el vaciado, la forja o para trefilar; los moldes; cortadores para alambre; mandriles; reglas de metal; calibradores; banco para trabajo, un eje flexible.
Para decorar se tienen el buril, cincel, punzón, bruñidor, limas de todo tipo de grosores, compás, taladros, tijeras, pinzas, muelle, alicates, viseras con aumento, sellos de metal. Algunos de estos materiales o herramientas no existían en un principio, son foráneos y fueron agregándose con el tiempo.
Son dos artes completamente diferentes. La alfarería es el arte de elaborar vasijas de barro cocido; la orfebrería fabrica y labra diferentes adornos, utensilios, joyas, con metales y sus aleaciones.
Utilizan distintos procedimientos y técnicas. Los productos de la alfarería son habitualmente de orden primitivo o carácter popular. Los de la orfebrería, generalmente tienen gran valor económico, son ostentosos, muy bellos; muchos de carácter religioso o decorativo.
Son muchos los pueblos indígenas que la usaban. Sus creencias, símbolos e imágenes sagradas desempeñaron un rol preponderante en este arte. Se destacan los aborígenes de Colombia, por ser un país considerado patrimonio orfebre del mundo. Entre ellos se encuentran la etnia Quimbaya, los Muiscas, Taironas, y la cultura Sinú.
Asimismo, en Perú la Cultura Moche, Sican y Vicús, los incas y otras civilizaciones andinas. En Ecuador, la cultura Machalilla, Chorrera, los indígenas de Porto viejo. En Chile el pueblo mapuche. En la zona del Amazonas los Pueblo Yanomami, los Botocudos.
La importancia de este arte es evidente, ya que fue una de las primeras expresiones artísticas de toda la historia de la humanidad. Cada cultura plasmó su huella permitiendo que las nuevas generaciones conocieran aspectos relevantes de ellas.
Por otra parte, mediante la orfebrería se han elaborado, artesanalmente, piezas exclusivas con un invaluable valor artístico y decorativo. También maravillosas obras acordes a los distintos movimientos artísticos emergentes y de los recientes, todos ellos tienen permanencia como manifestación artística en iglesias, joyas, múltiples objetos.
Además, la orfebrería no es aplicada solo al arte decorativo, ha sido utilizada con propósitos prácticos o alusivos a determinadas tradiciones o circunstancias relevantes de la sociedad. Como si fuera poco, es de utilidad en trabajos de restauración y representa una industria pujante a nivel mundial.
La evolución de este arte abarca varias etapas. Para comprenderla mejor se divide el estudio en sus diferentes variantes. Algunos ejemplos son la orfebrería cristiana, la orfebrería prehelénica, la orfebrería gótica, la orfebrería renacentista y la orfebrería occidental.
Del Valle, Numiralda. (2021). Orfebrería. Recuperado el 22 de febrero del 2024, de Faqs.Zone: https://faqs.zone/orfebreria/
