Mapa geológico
El mapa geológico identifica las estructuras geológicas correspondientes a una determinada superficie. Se hace a partir del plano topográfico. Es el resultado de una exhaustiva investigación de campo y el análisis de las muestras recogidas durante la exploración. Coloca sobre un mismo documento especificaciones de los tipos de rocas, edad y litología, representadas por colores, trazos y códigos. El uso de leyendas facilita su interpretación. Se propone en el desarrollo de múltiples disciplinas.
El mapa geológico es el pliego horizontal en el que se grafican los recursos minerales y superposiciones de capas existentes en determinada región. Presenta, a escala reducida, la información relativa a las dimensiones del espacio: ancho, altura y profundidad. También a una cuarta dimensión, tiempo geológico.
Está hecho sobre un mapa topográfico. Utiliza símbolos y tramas de colores que se definen en las leyendas, para abrir la puerta al entendimiento del documento cartográfico.
Tiene un gran valor científico y práctico. Es útil en la exploración mineral, la planificación territorial y urbanística, el desarrollo de la arquitectura y agricultura. Además, muestra los riesgos geológicos, se usa para planificar las actividades de prevención.
El papiro de las minas, elaborado en el año 1 150 a.C., es considerado el antecedente más antiguo del mapa geológico. Describe la región minera del uadi Hammamat, en Egipto. Indica la distribución de diversidad de rocas, yacimientos, minas de oro y pozos de agua.
Desde entonces, se mencionan otros documentos de este tipo. Entre ellos A New Philosophico-Chorographical Chart of East Kent, elaborado por el geólogo inglés Christopher Packe en 1 743. También el mapa de una parte de Auvernia, o figuras de, la corriente de lava, realizado en 1 771. Este último se basó en la investigación del geógrafo y geólogo francés Nicolás Desmaret sobre la geología y los volcanes de la región histórica de Francia.
El geólogo botánico William Maclure acabó en 1 809 el mapa de Estados Unidos, que indica la ubicación de sólo cinco clases de rocas. Seis años después, en 1 815, se hizo el mapa de Gran Bretaña, a manos del geólogo inglés William Smith. Este es citado como el primer mapa geológico de la historia, por la información resumida y practicidad de sus principios.
El mapa geológico resume sobre una base topográfica los diferentes tipos de rocas que existen en una superficie. Grafica su disposición en el espacio y la relación o tipos de contactos entre ellas, sea sedimentarios, ígneos, límites de procesos metamórficos, o contactos mecánicos.
Colores, tramas y signos convencionales permiten representar la gran cantidad de datos a escala reducida. El mapa va acompañado de una leyenda en la que se describe el significado de cada elemento gráfico. Cuando la tonalidad del color es muy parecida entre una y otra unidad cartográfica, estas se codifican con el uso combinado de números y letras.
Las unidades cartográficas constituyen los elementos primordiales del mapa geológico. Cada una constituye un volumen de roca con litología y asociación litológica invariable, el tiempo y los contactos o superficies que lo demarcan.
En el documento se significan los planos axiales. También las diaclasas y trazas de foliación, entre otros factores afines a la geometría oculta de las unidades cartográficas. Se simbolizan las medidas de estratificación; y datos relativos a los ejes de pliegue y estrías de falla. Además del estado de los depósitos fósiles utilizados como referencia para datar las rocas.
Mapas geológicos más específicos incluyen columnas estratigráficas para el registro sedimentario, paneles de correlación y esquemas de relaciones estratigráficas. Pueden contener cortes geológicos para una mejor perspectiva de la distribución.
Para realizar un mapa geológico se debe tener noción de la geología, para distinguir los tipos de rocas y fracturas que aparecen en la superficie. Además de calcular la edad, expresar la geometría y disposición en la región.
Los datos se obtienen en el terreno y a través de estudios para la caracterización litológica, petrológica, bioestratigráfica y estructural de los materiales. Es necesario también desarrollar técnicas geofísicas y de teledetección.
Entre las técnicas de mapeo se encuentra el contraste u oposición del mapa topográfico con las fotografías aéreas de la zona. Estas proporcionan información sobre los niveles del terreno y la distancia entre estructuras. Se usan igual fotografías sobre el terreno para cotejar datos.
Son necesarias las notas de campo y la toma de muestras de los diversos estratos y cepas rocosas. Lo que se aprecia durante la exploración, se confirma en los laboratorios, a través de estudios microscópicos, para la correcta clasificación de los minerales.
Sobre la carta, el uso de colores, trazos y símbolos permite la disposición de los datos recogidos; y su descripción en la leyenda una correcta lectura. Hoy la incorporación de las nuevas tecnologías y procesos convierten el documento cartográfico en una base de datos más dinámica.
El mapa temático va acompañado de una leyenda descriptiva de las unidades cartográficas y la relación entre los muchos elementos. Anuncia los nombres formales, características físicas, propiedades y edades de las unidades, entre otros datos importantes.
En la leyenda, las unidades cartográficas se exponen cronológicamente, comenzando por la de menor data. El orden de la información contribuye a la fácil lectura de todos los elementos.
Es posible identificar la litología en un punto determinado de la región en un mapa de 2 dimensiones. Tener previsión de lo que posiblemente hay debajo de ese punto en un mapa 3D. O conocer la historia geológica en el documento cartográfico que resume las 3 medidas espaciales más el tiempo.
El mapa geológico, como se conoce hoy, fue una innovación del geólogo inglés William Smith. A principios del siglo XIX, Smith trabajó como perito para la industria minera y la construcción del canal del carbón. Observó los estratos de las rocas y los clasificó de acuerdo a los fósiles contenidos en ellos.
Notó que iguales sucesiones de rocas se podían encontrar en otras partes de Inglaterra y para probarlo estableció el principio de sucesión faunística. Recogió datos y muestras por todo el país y los sistematizó.
El geólogo empleó acuarela en diversos tonos para identificar cada unidad de tiempo geológico, esto le concedió al plano apariencia tridimensional. Finalmente, elaboró en 1 815 el primer mapa geológico de Inglaterra, Gales y parte de Escocia. En principio sus logros fueron ignorados por la Sociedad Geológica de Londres. El reconocimiento llegó a partir de 1831. Sus técnicas continúan vigentes doscientos años después.
El mapa geomorfológico simboliza las formas de la superficie terrestre, continental u oceánica, su génesis y actual comportamiento. Es un mapa detallado con contenidos morfométricos, morfográficos, morfogenéticos y morfocronológicos. Su constitución es compleja y diversa en el mundo, no hay unificación de las técnicas, signos y leyendas. Hay pliegos básicos, teóricos o generales.
La geomorfología, derivada de la geografía y la geología, tiene relación con otras ciencias. Se sirve de la química, física y biología. Para la realización del mapa geomorfológico son precisos los conocimientos en geografía física: climatología, hidrografía, glaciología y pedología. También en geografía humana, por la relación hombre-medio y riesgos naturales; y en geografía matemática, se parte de la topografía.
De la geología se toman el origen y distribución de las rocas, por su incidencia estática y dinámica en los procesos geológicos.
El principio de sucesión faunística desarrollado por William Smith no sólo fue productivo para la representación de los estratos rocosos. Dio origen a la moderna bioestratigrafía y es una de las bases de la teoría de evolución biológica.
El mapa geológico permite conocer las particularidades naturales y minerales del territorio, tipos de rocas, materiales adyacentes, formaciones tectónicas, yacimientos fósiles, fuentes y recursos minerales.
Es utilizado en trabajos de campos y exploraciones, la producción de hidrocarburos, y el aprovechamiento de otros recursos minerales. Proporciona datos para llegar directamente a los recursos causando el menor impacto al terreno. Es referencia en la enseñanza-aprendizaje de diversas disciplinas.
El actual mapa geológico de España está elaborado en pliegos por regiones, utilizando la escala 1:50 000. Excepto algunas islas cuyas representaciones obedecen a la escala 1:25 000.
Fue creado por el Instituto Geológico y Minero de España entre los años 1 972 y 2 003. Describe la naturaleza de los recursos minerales, su colocación en el terreno y las relaciones geométricas entre las unidades cartográficas.
Castro, Laura. (2021). Mapa geológico. Recuperado el 22 de febrero del 2024, de Faqs.Zone: https://faqs.zone/mapa-geologico/
