Mesosfera
Muchos hemos tenido la oportunidad de ver estrellas fugaces, pero no todos sabemos de dónde proviene. Son partículas de meteoritos que han sido desintegrados por una capa localizada en la atmósfera denominada mesosfera. Ésta también es la responsable de la creación de la afamada aurora boreal, y es la única franja donde se originan las noctilucentes; esas olas iluminadas que observamos en los crepúsculos hasta llegar el anochecer. ¿Quieres saber más? Sigue leyendo aquí.
Hace referencia al espacio de la atmósfera, ubicado arriba de la estratosfera y debajo de la termosfera. Es la tercera capa, la más fría, que alcanza los -80°C, a muy corta distancia. Estando en este lugar, desde una nave espacial, es factible vislumbrar la estructura de los vientos.
Conjuntamente con las demás capas, la mesosfera da forma a la homósfera. Su nombre procede de los vocablos griegos “mesos”, que se traduce como “medio”, y “sphaira”, que significa “esfera”. Literalmente se llama “esfera media”.
Es una porción del manto inferior de la Tierra y su núcleo externo. Su final viene dado por la discontinuidad secundaria de Wiechert, límite entre el núcleo externo líquido y el núcleo interno sólido. Se destaca como una de las capas con más baja presión.
La primordial de todas sus funciones, es conservar las condiciones atmosféricas requeridas para la vida, a través del proceso de ionización y otras reacciones químicas. Asimismo, junto a la capa de ozono estratosférico, la mesosfera impide la llegada de radiaciones dañinas, como los Rayos UV.
Otra de sus funciones importantes, es la protección del planeta de las masas rocosas celestes que intentan ingresar a la atmósfera. Es decir, meteoritos y asteroides ardientes que se calientan por la fricción de moléculas de aire.
Se estima que al menos 40 toneladas de meteoritos rozan a la Tierra diariamente, pero la mesosfera actúa velozmente demoliéndolos antes de que ocasionen daños a su superficie. En esta capa también tienen lugar las auroras boreales y australes, fenómenos que resultan altamente atractivos para el turismo en algunas zonas del planeta.
Este proceso se dio hace millones de años. La primera fracción de la atmósfera se formó debido a la lluvia de mayor tiempo conocida en la historia, responsable de la creación de los océanos. Antes del surgimiento de la vida, el metano era el gas de mayor concentración.
Se cree que al igual que el resto de las capas, la mesosfera es consecuencia de la desgasificación que atravesó el planeta durante el enfriamiento dado en las primeras etapas de su formación. Al reducirse la temperatura, muchas sustancias “abandonaron” su estado gaseoso para volverse sólidas o líquidas.
Igualmente, se suman numerosas cantidades de polvo y gases emanados por los volcanes, y otros cambios surgidos a largo plazo, como las aportaciones de O2 y N2, y el incremento de CO2, por mencionar sólo algunos de ellos.
La extensión de la mesosfera alcanza de 50 km a 80 km. No hay certeza de los límites exactos inferiores y superiores, puesto que varían en relación a la altitud en la que se halle y la época climática. No obstante, por lo general el límite inferior se encuentra a una altura de 50 km sobre la superficie terrestre. Por su parte, la mesopausa (zona de la atmósfera que sirve de límite entre la mesosfera y la ionosfera) está cerca de los 100 km.
Existen ciertas excepciones, pues algunas latitudes medias y altas durante el clima veraniego descienden a 85 km. De allí que la zona más lejana del planeta Tierra podría estar ubicada a unos 80 kilómetros de altura. Como referencia, vale decir que a esta distancia no logran llegar los aviones, pero la capa resulta tan delgada como para que los satélites construidos por el hombre puedan tocarla. Por esta razón su estudio resulta complejo de realizar.
Entre sus características más destacadas están la falta de vapor de agua y el declive de las marcas térmicas. Posee aproximadamente 35 km de grosor, es decir, unas 22 millas. Conforme se aleja de la Tierra se vuelve más fría.
Se resalta que en la mesosfera existen numerosos gases de baja densidad, en su mayoría formados por oxígeno, nitrógeno y dióxido de carbono en la misma proporción, semejantes a los existentes en la troposfera. Sin embargo, ambas capas difieren entre sí, especialmente por el aire de la mesosfera que tiene menor densidad, bajo nivel de vapor de agua y presencia de ozono.
Por su ubicación, es una de las capas que no pueden ser muy exploradas. De allí que desconozcan muchas de sus características. Es muy baja para enviar satélites científicos y muy alta para enviar aviones o globos.
La composición ha cambiado con el tiempo, pero se presume que la mesosfera está compuesta de un 0.1% de aire. Contiene bajas concentraciones de vapor de agua y ozono; y la fórmula química del aire depende considerablemente de la altitud. Si es mayor, los gases residuales inician el proceso de estratificación, de acuerdo a su masa molecular. Esto ocasiona una separación por gravedad y los gases existentes tienden a desaparecer.
En esta capa también se hallan un sinnúmero de átomos ionizados, es decir, átomos con gran carga eléctrica, por lo cual no son neutros. Los iones facilitan el envío de señales de radio de onda larga.
Las variaciones de temperatura son propias de esta capa, superando los 190 – 190 K, cuando la altitud está en 80 km. En su región superior se ubica la mesopausa, la cual se considera el espacio natural más frío del planeta. A tal magnitud que en algunos puntos considerados cálidos, pueden registrarse -5 grados Celsius de temperatura.
Es fundamental tomar en cuenta que la disminución gradual de la temperatura experimentada en la mesosfera es consecuencia de una menor cantidad de aire, a medida que sube la altura. En este caso particular, el aire es tan escaso que solo constituye un 0,1% de toda la masa de la atmósfera.
Por la poca densidad de aire presente en la mesosfera, es habitual que se produzcan turbulencias y perturbaciones, llamadas ondas atmosféricas. Asimismo, en ella se observan, con relativa frecuencia, las lluvias de estrellas fugaces, que no son más que los destellos generados por la destrucción de los meteoritos en la termosfera.
Además, es el lugar donde se forma un tipo especial de nube, conocido como “nube noctilucente”, en las áreas cercanas al polo Norte y Sur. Su particularidad radica en que se hallan mucho más arriba que cualquier otra de su clase. En la mesosfera También sucede otro fenómeno natural que consiste en la creación de un tipo de relámpago llamado “rayo duende”. Se trata de una descarga eléctrica que se produce por encima de las nubes y que puede llegar a la estratosfera.
Como todas las capas, tiene una fundamental importancia. Específicamente, permite el desenvolvimiento adecuado de la ionización y otros mecanismos químicos, vitales para la evolución. De igual forma, cumple una función defensiva ante la presencia de asteroides y meteoritos, librando a la humanidad de terribles catástrofes mundiales. Este fenómeno es conocido como “meteoro”.
Por otra parte, la mesosfera desde el punto de vista químico se compone por los mismos elementos de la troposfera, incluyéndose entre estos el oxígeno y el nitrógeno, los cuales son esenciales para la vida en el planeta. Se resalta como dato interesante, que en esta parte se halla la sodiósfera, la cual absorbe la “radiación azul”, dándole el tono característico al cielo.
A diferencia de la mesosfera, la termosfera o cuarta capa de la tierra, contribuye a mantener y regular la temperatura del planeta, atrayendo la radiación UV y los Rayos X, que emite el sol. Conforme el Astro Rey incrementa su temperatura, la termosfera se pone gruesa e incrementa su poder protector. Se puede aseverar que su temperatura varía con la acción solar.
La mesosfera experimenta mareas y olas que facilitan el movimiento de energía en su interior. La termosfera posibilita la exploración espacial y las comunicaciones. Asimismo, recicla el agua, mientras que absorbe la energía solar, lo cual cuida al planeta de una inminente helada, producto de las temperaturas frías del espacio.
Se puede decir también que en la Mesosfera se encuentra una subcapa, conocida como ionosfera, que contiene iones cargados, vitales en las comunicaciones inalámbricas y de radiodifusión en el planeta. Debido a que la termosfera tiene una baja densidad de aire, esto ha puesto en entredicho que pertenezca a la atmósfera terrestre. Algunas investigaciones sugieren que forma parte del espacio exterior.
Castro, Laura. (2020). Mesosfera. Recuperado el 22 de febrero del 2024, de Faqs.Zone: https://faqs.zone/mesosfera/
