Tectónica de placas
La teoría de la tectónica de placas sucede a la teoría de la deriva continental, carente de mecanismos probables. Expone de manera práctica la estructura del planeta, la relación existente entre las partes y el desarrollo de innumerables fenómenos. Demuestra a través de estudios multidisciplinarios que la división actual de los continentes no era igual tiempo atrás. Sugiere la existencia de supercontinentes que gradualmente se fueron separando.
La tectónica de placas es la teoría que define la litósfera, la capa exterior y dura del planeta, como un conjunto de placas armables. Expone que las llamadas placas tectónicas se deslizan lentamente sobre el manto terrestre y se corresponden entre sí, dando lugar a múltiples eventos. Sustenta el principio y actual segmentación de los continentes y océanos.
Llena los vacíos en la teoría de la deriva continental. Enuncia las causas y mecanismos a través de los cuales se modifica el relieve terrestre. La tectónica de placas sugiere la existencia en el mundo de 15 placas principales y 43 secundarias. Dice pueden ser de corteza continental, oceánica o mixta. Estas se desplazan como en una correa transportadora sobre el globo terráqueo.
El deslizamiento paulatino y continuo de las placas tectónicas encuentra sus precedentes en diversos hallazgos. En 1885, el geólogo austriaco Eduard Suess insinuó que hubo un supercontinente al que llamó Gondwana. En base a descubrimientos de restos fósiles de plantas e impresiones de origen glacial, aseguró que estuvo integrado por África, India, Australia, Sudamérica y Madagascar.
En 1 915, el astrónomo y meteorólogo alemán Alfred Wegener, insistió en el tema. En su libro El origen de los continentes y océanos, expuso la existencia remota de un supercontinente al que llamó Pangea “toda Tierra”. A decir del científico, la gran masa se desunió por efecto del alejamiento continental. Hizo infinidad de anotaciones y presentó algunas evidencias. Su teoría no fue aprobada entonces.
En 1 926, el científico irlandés John Joly expuso que el calor radioactivo generado en el núcleo se almacena bajo la corteza y derrite el manto. Su principio de la convección térmica, dio lugar a la teoría de la convección en el manto, expuesta en 1939. Los flujos de convección son el resultado del calentamiento por gradientes de temperatura.
En 1 937, el geólogo sudafricano Alexander Logie du Toit divulgó evidencias de la existencia de los supercontinentes Laurasia y Gondwana. Estos estuvieron aislados por el mar de Thetys.
La actual teoría de tectónica de placas deriva del contraste de tesis uniformistas, contraccionistas, geosinclinales e isostáticas. Acoge la deriva continental y la expansión de los fondos oceánicos. Ameritó la participación de un equipo interdisciplinario.
La tectónica de placas es una hipótesis cónsona, describe la estructura, naturaleza, relación y fenómenos que se producen a partir de las placas tectónicas.
Expone que las láminas se corren lentamente gracias a los flujos de convección. La velocidad del desplazamiento no es igual en todas las placas, unas se mueven centésimas de milímetros y otras cerca de 10 centímetros por año. Las placas chocan entre sí, convergen; se separan, divergen; o se sobreponen sobre otras.
Los movimientos tectónicos dan origen a la formación de montañas, plegamientos, fallas geológicas, la expansión de océanos y el alejamiento de los bloques. Influyen directamente en la actividad sísmica, volcánica, minera y petrolífera de las regiones.
La tectónica de placas es la confirmación y desarrollo de la teoría de la deriva continental. Surgió en 1960 como resultado de la investigación emprendida por un equipo multidisciplinario, integrado por expertos de varios países. Entre ellos, los sismólogos Linn Sykes, Maurice Ewing e Hiroo Kanamori. Los geofísicos Harry Hammond Hess y Allan V. Cox; y los geólogos Tuzo Wilson y Walter Pitman.
Las anotaciones sobre la distribución de los continentes, mares y el centro de la Tierra, se apoyaron además en las aportaciones de otros grandes. Entre ellos, el creador de la teoría de la deriva, Alfred Wegener. También Robert Sinclair Dietz, James Dwigh Dana, James Hutton y Charles Lyell.
La teoría de la tectónica de placas enuncia cómo se constituye el relieve de la Tierra. Plantea que la litosfera está hecha de placas rígidas que flotan sobre la astenósfera. Y define esta última como una capa mucho más caliente, cerca de 4500ºC de temperatura, constituida por materiales maleables. Su calor proviene del núcleo de la Tierra.
Según la tesis de los científicos, las llamadas placas tectónicas se mueven constantemente, alejándose o colisionando entre ellas. La tendencia provocada por la convección del manto, hace que el suelo fundido por el calor emerja entre los bordes de las placas. Una vez en la litósfera, éste se enfría constituyendo nueva superficie y transformando el relieve de la Tierra.
Existen múltiples evidencias de la articulación y avance de las placas tectónicas. Se comprueban con el hallazgo de restos fósiles de plantas y animales de igual especie en formaciones rocosas de varios continentes. Resulta inverosímil el viaje de estos seres vivos entre uno y otro bloque separado por grandes extensiones de tierra y/o océanos. Se conjetura que alguna vez los territorios estuvieron unidos.
Una muestra de dicha unión, es el encuadre simétrico de las líneas costeras y más exactamente de las plataformas continentales de dos o más regiones. La cartografía de las regiones despejó dudas al respecto.
Otra razón que afianza la teoría de la tectónica de placas es el paleomagnetismo. La dirección del campo magnético de los polos norte y sur no coincide con el eje de rotación de la Tierra. No en la localización actual de los bloques.
El campo magnético en el eje de rotación de la Tierra es estable, apunta entonces a que los continentes cambiaron sus posiciones relativas. Con el estudio de la magnetización de los minerales, realizado a partir de 1950, se demostró el cambio en la orientación del campo magnético en flujos de lava.
El emplazamiento de las placas tectónicas es causado por las corrientes de convección. En el proceso intervienen la temperatura y el peso. Cuando el manto de la Tierra se calienta adquiere un carácter maleable, los materiales cálidos y livianos suben, los fríos y pesados bajan. El movimiento lento y frecuente, agrega nueva corteza a las placas y estimula su deslizamiento.
El alejamiento de las placas también es originado –y probablemente es la raíz principal- por la gravedad. Inmensas fracciones de la litósfera oceánica sucumben en las llamadas zonas de subducción, creando una fuerza gravitacional que hala al resto de la placa. Ese impulso es el responsable de la actividad evidenciada de las placas continentales y oceánicas. Se dice se desplazan unos centímetros cada año.
Tanto el alejamiento como el choque de las placas pueden originar sismos y formaciones volcánicas, entre otras alteraciones ¿Cómo se produce el sismo? Gran cantidad de energía amontonada por la articulación de las placas es liberada al exterior de la tierra. En el llamado epicentro, la sacudida tiene su mayor intensidad. Desde el núcleo la energía se propaga en todas las direcciones en forma de ondas.
El sismo también puede suscitarse como consecuencia de erupciones volcánicas o el hundimiento de la superficie, procesos igualmente derivados del deslizamiento de las placas.
La teoría de la tectónica de placas proporciona un enfoque exhaustivo de los procesos que dieron origen a continentes y océanos. Describe la dinámica del planeta y relaciona aspectos de la geología que antes parecían ajenos. Revela la ubicación de plantas y animales en el pasado, también la ubicación remota y presente de importantes venas minerales.
A partir de sus principios pueden explicarse ampliamente terremotos, volcanes y cinturones montañosos, entre otros procesos geológicos y geofísicos. También predecir los fenómenos, información valiosa para evitar mayores daños en las poblaciones. Se considera la gran teoría explicatoria de las Ciencias de la Tierra.
En 1 950, con el desarrollo de la oceanografía, expertos documentaron la existencia de una cadena montañosa submarina en el Atlántico Norte. La sucesión de montañas ubicadas al centro del océano superaba los 2 000 metros de altura, y estaba rodeada de profundos abismos, de hasta 4 000 metros. 10 años más tarde este fenómeno fue explicado por el geólogo Harry Hammond Hess, quien fundamentó la expansión del fondo oceánico.
Expuso que al tiempo que dos enormes partes de la litósfera se apartan, halan el fondo oceánico. Emerge del manto material fundido que forma una cadena volcánica y rellena el vacío dejado por el alejamiento de las masas. Las profundas fosas oceánicas que bordean algunos continentes y arcos de islas, son zonas de subducción que absorben corteza y evitan el crecimiento desproporcionado de la Tierra.
Castro, Laura. (2021). Tectónica de placas. Recuperado el 22 de febrero del 2024, de Faqs.Zone: https://faqs.zone/tectonica-de-placas/
