Beluga
Dentro del reino animal, específicamente en mares y océanos, se encuentra un animal fascinante conocido como beluga o ballena blanca. El término beluga procede de la palabra rusa byelukha, que se traduce como blanco, y define a una especie muy inquieta y atrayente, no sólo por su color, sino también por ser un tipo de orca afable y amistosa.
La beluga es una ballena blanca clasificada como cetáceo odontoceto, aunque esta palabra no es aceptable en las ballenas con dientes como la beluga. Es el único miembro viviente del género Delphinapterus. No obstante, no es un delfín, nombre con el que se conoce a las especies de la familia Delphinidae.
Este cetáceo es encantador y sereno, pero depredador, por lo que no se debe dejar de tomar previsiones ante su presencia. Si tiene hambre puede atacar usando sus dientes para desgarrar y engullir, ya que no mastica.
Pertenece al reino de los Metazoa, subreino Eumetazoa, clase Mammalia y orden de los Cetáceos. De la especie leucas y género Delphinapterus, es el único miembro vivo, junto al narval (Monodon Monoceros), de la familia Monodontidae; palabra griega que significa un solo diente. Sin embargo, este nombre sería inadecuado para las belugas, ya que estas ostentan varios dientes.
Al nacer es de color gris o castaño. A medida que se va haciendo adulta adquiere un hermoso tono blanco. Destaca en las belugas su habilidad para emitir silbidos y ciertos ruidos que utilizan para comunicarse. Logran imitar diferentes entonaciones, incluyendo la voz humana.
Al lado de los narvales, son los únicos animales pertenecientes a los Monodontidae. Su tamaño es de unos 5,5 m de largo, aproximadamente, llegando a pesar hasta 1.600 kg. Son de constitución fuerte, con la cantidad más alta de manteca entre los cetáceos.
Su oído es bastante avanzado, con un eco localizador que les ayuda a desplazarse y a ubicar ranuras para salir a respirar cuando lo requieren. Es una especie nadadora que logra alcanzar profundidades de unos 800 m. Puede nadar hacia atrás, sin ningún inconveniente, y girar la cabeza en orientaciones diferentes. Es bastante inteligente, amigable y muy curiosa.
Las belugas son difíciles de reconocer en el mar, ya que además de su inusual color blanco, carecen de aleta dorsal. Y del mismo modo muestran una protuberancia delantera, donde se aloja un órgano conocido como melón, el cual es voluminoso y mutable. Ambos son aspectos únicos de su especie.
A las belugas les gusta desplazarse y reunirse en grupos, como buen animal gregario que es. Logran reuniones de hasta 10 individuos. Nadan de forma silenciosa y suave, y están capacitadas para bucear y efectuar inmersiones de gran profundidad. Estos animales soportan muy bien las bajas temperaturas, en aguas de hasta -32 °C.
En verano, les fascina establecerse en bahías cálidas, en las cuales no hay mucha profundidad. En estos espacios se les ve cómodas y calmadas lográndose agrupar, en su desplazamiento, a más de mil ejemplares. Lo hacen con el fin de alejarse del intenso frío de las aguas norteñas y del hielo donde muchas veces quedan trabadas.
Las belugas emiten un sonido alto usado para socializar. Al contrario de otro tipo de ballenas, se cree que pasan mucho tiempo interactuando entre ellas. De hecho, los machos forman clanes muy grandes y las hembras, al lado de sus hijos, crean los suyos propios.
La alimentación es variada y de oportunidad; se adapta a la fauna del lugar donde se encuentran y a la época del año. Consiste principalmente en crustáceos, peces, camarones, moluscos, cefalópodos y salmón. Estos animales diariamente pueden consumir el tres por ciento de lo que representa su masa corporal.
Las belugas prefieren salir a cazar en equipo, habito que les garantiza, a cada una, obtener algo para comer. Procuran establecerse en grupos de unos diez individuos, sin embargo llegan a formar conjuntos de hasta unas cien especies.
Algunos grupos de belugas efectúan migraciones temporales y otras persisten en espacios comparativamente pequeños durante todo el año. Cuando las capas de hielo progresan en otoño buscan manera de migrar al sur. En verano dejan las zonas fraccionadas de hielo yéndose a desembocaduras poco profundas y saladas, así como a salidas de los ríos.
Soportan temperaturas del agua entre 0° C y más de 16° C, aunque la mayor parte del año las temperaturas permanecen más bajas aún. Hay aguas tan frías que si una beluga descansa en la superficie, el agua al congelarse forma una cubierta de hielo que moldea su espalda. Dicha forma permanece intacta cuando la beluga se aleja.
Lo dicho anteriormente muestra que las belugas tienen la capacidad de desplazarse libres entre las aguas saladas y dulces. Es una destreza que la generalidad de los cetáceos no tiene.
Esta especie se encuentra distribuida en todo el anillo del océano Ártico y los mares y litorales inmediatos. En el verano están ubicadas en las aguas de bajos fondos. Algunos lugares son el lado norte de Canadá, las playas de Alaska, el norte de Rusia y el oeste de Groenlandia. Igualmente, en ciertas regiones del océano Ártico, se localizan de los 76° y 78°, hasta los 80° de latitud Norte.
Las cantidades más extensas encontradas hacia el sur, son las que alcanzan los grupos de los estuarios del río San Lorenzo y del río Saguenay. Estas aguas están junto a la villa de Tadoussac en Quebec, Canadá. También se ubican en el Atlántico y delta del río Amur, en las aguas colindantes con las islas Chantar y Sajalín en el mar de Ojotsk.
El tiempo de reproducción de la beluga es estacional, con cierta variación entre regiones geográficas. Generalmente este ciclo sucede de abril a mayo. Varía en ciertas áreas, en las cuales el tiempo reproductivo inicia en febrero y culmina en junio.
Se ha observado que la creación de hormonas reproductivas, presenta una variación cuando están en cautiverio. Es decir, viven en lugares como zoológicos y acuarios, ocurriendo la concepción entre marzo y mayo. Existe la opinión de que la hembra, durante el lapso de reproducción, se aparea con diferentes machos.
La beluga macho se desarrolla sexualmente entre los 4 o 7 años y la hembra lo hace entre los 4 y 9 años. La fémina procrea cada 2 o 3 años, con embarazos que van desde los 12 a 15 meses. Dan a luz una cría por cada gestación y no hay constancia de nacimientos múltiples en belugas.
El principal motivo por el que las ballenas salen a la superficie y realizan sus saltos es para poder respirar. A pesar de pertenecer a un ambiente acuático necesitan del oxígeno de la atmósfera para sobrevivir. Con cada toma de aire, una ballena adquiere casi el 85% de toda su capacidad respiratoria.
Este espécimen adquiere el aire a través de orificios nasales denominados espiráculos. Estos exhiben terminaciones nerviosas, en la parte superior de la cabeza, que hacen que el animal sepa si está fuera del agua.
La ubicación de los espiráculos permite que estén en la superficie descansando tranquilamente y tomando el oxígeno que necesitan, sin esfuerzo alguno. Los espiráculos están revestidos por una película que funciona como válvula. Ésta válvula, en un estado relajado del músculo ayuda a que el orificio permanezca sellado, evitando que el agua entre al mismo.
Las belugas no están aptas para respirar por la boca, ya que los orificios nasales no se comunican con esta. Es así como las ballenas tienen un proceso digestivo independiente del respiratorio. Mientras comen, el agua no les puede llegar a los pulmones.
Estando el aire en las fosas nasales pasa a la tráquea y luego a los pulmones, así el oxígeno inicia su circuito respiratorio. Es llevado por la sangre, convirtiéndose al final en dióxido de carbono. Este es expulsado junto con el nitrógeno por el mismo espiráculo. Al exhalarlo, se puede observar torrentes de agua que prorrumpen de las ballenas en forma de columnas de agua y aire.
La UICN, Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, es la organización medio ambiental mundial más vieja y más grande del mundo. La misma es una autoridad y paladín en sostenibilidad y medio ambiente. Ella ha catalogado a las belugas como casi amenazadas, en peligro crítico y como vulnerables, especialmente las que se encuentran en las aguas árticas y sub árticas en toda la costa del lado norte de Alaska, Canadá, Groenlandia, Noruega y Rusia. Otras están en riesgo debido al ruido, contaminación, tráfico marino y actividades industriales.
Castro, Laura. (2020). Beluga. Recuperado el 22 de febrero del 2024, de Faqs.Zone: https://faqs.zone/beluga/
