El sirope de agave es una especie de miel vegetal que se ha hecho muy popular en los últimos años. Se obtiene de una de las muchas variedades de la planta de agave, de la cual también se produce el tequila mexicano. Es sugerido como un buen reemplazo del azúcar blanco, por su bajo índice glucémico.
El sirope de agave es un endulzante de gran poder. Se le conoce como néctar de agave o miel de agave. Se obtiene de las pencas del agave azul y del agave maguey. Constituye una opción efectiva como endulzante porque tiene una alta concentración de fructosa, pero el índice glucémico es de solo un 25%. Contiene enzimas naturales, vitaminas, minerales, fibra e inulina, componentes que lo destacan como uno de los mejores. Actualmente hay sirope de agave sabor a fresa, chocolate y una presentación especial que es en polvo.
El color y la textura del sirope de agave son semejantes a los de la miel, pero por su origen netamente vegetal, tiene propiedades y componentes distintos. Su contenido de grasas y calorías es inferior, lo que también lo diferencia de otros endulzantes.
Tiene una capacidad endulzante muy potente, dos veces mayor que el azúcar blanco. Se destaca por su particular dulzor, preferido por muchas personas entre productos similares. También su aroma es muy atrayente porque es dulce y a la vez muy fuerte.
El sabor es más suave que el de la miel o el del jarabe de arce. Es de fácil disolución. Al utilizarse es necesario cerrar muy bien el bote o recipiente y llevarlo al frigorífico a 8 grados, en un espacio donde permanezca seco.
Sus propiedades derivan de su composición en la cual destaca un 70% de fructosa y 25% de glucosa. Difiere de otros líquidos o productos como la fructosa o la panela, cuyo índice glucémico es alto.
Sus calorías son mayores que las del azúcar común. Tiene fructoligosacáridos, conocidos como fibra dietética soluble; niacina, proteínas y minerales como hierro, calcio, potasio, magnesio y fosforo. Está dotado de un importante contenido de vitaminas: vitamina A, vitamina B, vitamina B2 y vitamina C.
Para hacer sirope de agave es necesario que la planta tenga mínimo siete años. Se corta y de cada penca se procede a sacar la savia. Luego, se somete a un proceso por hidrólisis térmica o un proceso enzimático para la descomposición de los carbohidratos. Especialmente los fructanos, en azucares simples. Por último se filtra y concentra repetidas veces para obtener el sirope.
Antiguamente, los nativos mexicanos empezaron a ingerir la primera savia natural que se obtenía, llamada aguamiel. Es una bebida agradable y refrescante, posteriormente dejaban fermentar el aguamiel para producir una bebida alcohólica. Actualmente es tradicional en ese país con el nombre de pulque.
Este sirope se produce a partir de la savia liquida de sabor dulce encontrada en el centro de las pencas del agave azul y del agave maguey. Es una planta autóctona de América tropical, subtropical y el Caribe. Se distribuye entre México y el sur de Estados Unidos.
Es semejante a otras plantas como la yuca, el cactus y el aloe vera o comúnmente llamada Zabila. Sus hojas o pencas son gruesas, carnosas, colocadas en una roseta revestida por unas afinadas espinas. Tienen fibras que son utilizadas para tejer hamacas y otros objetos.
Por su origen tropical y subtropical, se desarrolla perfectamente en regiones de América Latina y el Caribe. Requieren de un clima semiseco y estar expuestas a la luz solar. La temperatura promedio que demanda son 22° grados C. Se reproduce por semilla o bulbill.
Es de lento crecimiento, tardándose de 8 a 10 años en madurar, momento en el cual está apta para la extracción de la savia de sus pencas y elaborar el sirope de agave.
El sirope de agave se produce de una planta llamada agave, cuyo origen se remonta a épocas milenarias cuando empezó a cultivarse. Al principio en México y en Estados Unidos, de allí se extendió por todo el mundo.
Es una planta suculenta o crasa; se denominan de esta forma a todas las que poseen algún órgano con capacidad para almacenar cantidades de agua. Desde esos tiempos era usada como un ingrediente en la cocina, hasta que en épocas recientes se empezó a elaborar el sirope.
Hoy en día, se utilizan las subespecies de agave azul y agave maguey para producirlo. Gracias a este sirope, que es exportado, la planta también se conoce mundialmente. Y, por esto la popularidad del edulcorante, sigue creciendo.
Es importante resaltar que existe una variedad de siropes de agave 100% puros extraídos de cultivos ecológicos certificados que están tomando un lugar importante en el mercado. Son originarios de la Unión Europea.
El sirope de agave es utilizado principalmente como endulzante, constituye una buena opción para quienes deseen utilizar productos naturales en su alimentación. Sirve como sustituto del azúcar refinado, otorgando mayor sabor y aroma a los alimentos con solo una pequeña cantidad.
Se emplea preferiblemente en bebidas liquidas frías como zumos, batidos, yogures o calientes como café e infusiones. Es ideal como topping para gofres, tortitas y helados. También es usado para elaborar postres, tartas, galletas, bollos, bizcochos.
En estos casos se sugiere diluirlo primero en la mantequilla, aceite, leche u otro líquido que lleve la receta para evitar que el sirope se endurezca o tueste. Igualmente, se debe poner papel sulfurizado o papel vegetal a las bandejas donde se llevan al horno para que no se adhieran.
Otro aspecto a considerar es que el sirope de agave precipita el oscurecimiento de la masa, por lo que se debe bajar la temperatura del horno a unos 15 o 20 °C. Todas estas sugerencias garantizan la obtención de elaboraciones excelentes y saludables.
El sirope de agave tiene muchos beneficios para el organismo:
Como todos los edulcorantes el sirope de agave tiene algunas contraindicaciones que deben ser tomadas en cuenta. Lo primero que debe saberse es que no es un producto completamente natural. Para producirlo es sometido a procesos mediante una serie de reacciones químicas.
Incluso hay algunos que son demasiado refinados, al punto que su composición se transforma en 100 % fructosa. Cuando así sucede, pierden parte de su valor nutricional y generan daños al organismo.
No puede ser ingerido por personas intolerantes a la fructosa. Incrementa los niveles de ácido úrico por eso quienes tienen hiperurcemia o gotatampoco deben utilizar sirope de agave.
Su consumo exagerado es dañino debido a la fructosa que puede convertirse en grasa en la sangre. Esto generaría triglicéridos altos, hipertensión, afecciones hepáticas. Aunque no eleva tanto los niveles glicémicos como el azúcar, las personas diabéticas no deben abusar de su ingesta.
Es necesario seleccionar sirope de agave de buena calidad porque existen en el mercado algunos tan refinados que incrementaron sus contenidos de fructuosa. Estos son los más dañinos o perjudiciales para la salud. En fin, hay que aprender a usarlo para beneficiarse de sus propiedades pero sin incurrir en el exceso.
Si se consume moderadamente el sirope de agave no engorda. Sus propiedades ayudan a bajar de peso. Por ejemplo la sensación de saciedad que produce, permite que se coma menos entre los horarios de comida.
Por otra parte, las calorías son menores que las del azúcar blanco común. Además, mejora la digestión del cuerpo impidiendo el estreñimiento y estimulando las evacuaciones regulares. Por ser de origen totalmente vegetal es idóneo para individuos veganos, facultad que no posee la miel. Muchos especialistas lo incluyen como endulzante en los regímenes dietéticos modernos.
En síntesis, puede decirse que permite eliminar consumo de alimentos, ingerir menos calorías, tener una adecuada digestión e ir diariamente al baño. Todas son condiciones favorables para no ganar peso.
Depende entonces de cada persona, ser consciente y no abusar de este producto. Recordando que el consumo de azúcares debe ser menos del 10% de la ingesta calórica total diaria.
Castro, Laura. (2020). Sirope de agave. Recuperado el 22 de febrero del 2024, de Faqs.Zone: https://faqs.zone/sirope-de-agave/