Casi todos alguna vez hemos escuchado sobre lo importante que son las vitaminas. Estas sustancias resultan necesarias y ofrecen múltiples beneficios al organismo. Desde su descubrimiento, a finales del siglo XVIII, son muchos los estudios que hablan sobren las funciones que desempeñan, los tipos que existen y su influencia en la prevención de enfermedades. Conocer en detalle sus características y aportes al organismo es vital para quienes desean mejorar su salud.
Las vitaminas son sustancias que efectúan un papel vital para el organismo. Estos compuestos heterogéneos y orgánicos no se producen internamente, sino que se obtienen de los alimentos. Una dieta balanceada puede ser suficiente para conseguir las dosis requeridas por el organismo para funcionar correctamente.
Existen varios tipos y estudios formales sobre ellas, y el descubrimiento de la mayoría surgió en 1929 de la mano de los científicos Christiaan Eijkman y Frederick Hopkins.
Las vitaminas son primordiales para las funciones fisiológicas. Ellas aportan nutrientes necesarios para que funcione todo nuestro organismo. Cada una tiene propiedades distintas según el tipo de vitamina:
Las vitaminas tienen una función vital. Si hay una ausencia vitamínica el cuerpo enfermará de gravedad y podría ocasionarse la muerte. En general estas sustancias nutritivas efectúan un papel como predecesoras de las coenzimas. Estos elementos regulan o catalizan varias reacciones físicas. Por ejemplo, la vitamina C es un agente potenciador del sistema inmunológico, incluso llega a combatir afecciones como cuadros gripales o resfriados.
En total existen 13 tipos de vitaminas cuya denominación suele abreviarse con una letra y un número. Están agrupadas o divididas en dos clases. Las vitaminas liposolubles y las vitaminas hidrosolubles.
La ingesta regular y equilibrada de vitaminas optimiza la salud y previene enfermedades. De manera específica cada una proporciona beneficios distintos:
Casi todos los alimentos que provee la naturaleza contienen vitaminas. Obtenemos más vitaminas cuando se consumen crudos. Los industrializados suelen perder gran parte de sus propiedades nutritivas, igualmente cuando se cocinan en exceso. Ejemplo:
Organismos de nutrición y dietética recomiendan la ingesta de al menos cinco porciones de frutas y vegetales diarios para obtener las vitaminas que necesita el cuerpo.
Aunque se concentran en pequeñas cantidades en el cuerpo, las vitaminas son vitales. Ellas ayudan a que todo el organismo funcione de manera adecuada. Su aporte es fundamental y la carencia de ellas genera enfermedades o padecimientos.
Al déficit de vitaminas se le llama avitaminosis. Es sumamente peligroso, ya que puede llevar a la muerte. Algunas señales de la afección son cansancio crónico, dolor en los músculos, uñas estriadas, faltas de memoria, encías sangrantes, torpeza, fallas en la visión y ausencia de ánimo. En los países pobres, la escasez de alimentos incrementa los casos de esta condición.
Generalmente, una dieta balanceada que incluya productos de todos los grupos alimenticios, es suficiente para proveer al organismo de las vitaminas requeridas. Sin embargo, en ciertas ocasiones hay que aumentar el consumo de algunas de ellas, especialmente cuando se padece diarreas, gripas, osteoporosis o estrés. También, durante el embarazo se tienden a recetar suplementos vitamínicos.
Las vitaminas no engordan. Estas sustancias prácticamente no contienen calorías. Muchas personas asocian el consumo de vitaminas con un aumento de peso. Esto no es posible. A menudo, el sobrepeso ocurre cuando se ingieren exceso de alimentos procesados que carecen de elementos nutritivos. Una buena dieta provista de vitaminas ayuda a mantenerse en el peso ideal.
Las vitaminas no poseen contraindicaciones. Todos podemos consumirlas, sin embargo, cuando se abusan de los suplementos farmacológicos de algunos tipos pueden crease problemas a la salud. Las vitaminas liposolubles podrían ser las más perjudiciales, pues se almacenan en el cuerpo y no se desechan con facilidad, lo que podría ser tóxico si se exagera con ellas. Las más peligrosas son las vitaminas B3, D, A, B6 y B3.
Es importante que la ingesta de presentaciones farmacológicas de las vitaminas sea supervisada por un médico. La mayoría de los multivitamínicos se comercializan sin receta médica, lo que ocasiona que algunas personas abusen de su ingesta.
Cabeza, Nadiuska. (2021). Vitaminas. Recuperado el 22 de febrero del 2024, de Faqs.Zone: https://faqs.zone/vitaminas/